La Policía y autoridades de China investigan el caso de un supuesto abuso a menores en una cadena de jardines de niños en Pekín.
De acuerdo con diversos medios internacionales, un grupo de padres denunciaron a la Policía de China que sus hijos, todos de aproximadamente tres años de edad, presentaban marcas de agujas en la piel y comportamientos erráticos reflejo del consumo de píldoras para dormir.
Los pequeños son alumnos de un centro de la cadena RYB Education Kindergarten situado en el lujoso distrito pekinés de Chaoyang.
Al menos ocho menores, cuyos padres han publicado fotos de las huellas de agujas en Internet, se han visto afectados, por lo que el jueves pasado, un grupo de padres organizaron una protesta frente al jardín de niños.
Según medios locales, algunos padres sospechan que se produjeron abusos sexuales, incluso uno de los padres denunció que a los niños “desobedientes” los obligaban a quedarse de pie desnudos o los encerraban en un cuarto oscuro.
Ante todo este escándalo, la comisión educativa del centro ha anunciado que tres educadores ya han sido suspendidos mientras continúa la investigación.
Mientras que el Ministerio de Educación ha iniciado una inspección a escala nacional de la gestión de los jardines infantiles y ha pedido a las autoridades locales tomar medidas para mejorar el comportamiento de los educadores y reforzar la supervisión.
La protesta no pasó desapercibida en las redes sociales, que llamaron a juzgar a los responsables del caso para que no haya más víctimas entre los pequeños.
La Policía ya ha confiscado las grabaciones de las cámaras de vigilancia instaladas en el citado jardín infantil del distrito de de Chaoyang.
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