La verdad es que Twitter prohíbe desde hace algunos años la “conducta sexual violenta” y las “escenas sangrientas gratuitas”
Después de que estos días se diera a conocer que a partir de 2020, Twitter prohibirá la distribución de contenido pornográfico, una vez que entre en vigor una actualización de sus Términos de Servicio y la Política de Privacidad, conforme al Reglamento General de Protección de Datos europeo (RGPD), la verdad es que se trata de una noticia falsa que se viralizó en la propia red social.
El punto es que las limitaciones de contenido no se especifican en dicho texto, sino en las Reglas de uso, que no especifican esa prohibición, pero sí una actualización en los Términos del Servicio que marcan que Twitter tiene derecho a “eliminar” o “negarse a distribuir un contenido” la capacidad de “limitar la distribución o visibilidad de cualquier contenido dentro del Servicio”.
Esto es, que se reduzca la visibilidad de los tuits de una cuenta que haya sido bloqueada en varias ocasiones o eliminar un contenido si se incumple con alguna de las normativas.
Por lo que, el contenido pornográfico está aceptado en las Reglas de Twitter, siempre y cuando se marque como contenido delicado y sea “material para adultos producido de forma consensuada”.
De esta manera, lo que sería considerado como un incumplimiento de las normas es lo relativo a “contenido capturado con cámaras ocultas y que muestra desnudez total o parcial, o bien actos sexuales”; “creepshots” o “upskirts” (imágenes tomadas por debajo de prendas como faldas y vestidos).
Así como la manipulación digital en la que se sobreponga la cara de una persona sobre el cuerpo desnudo de otra o que se tomen en un contexto íntimo, así como la sextorsión, además de “pornografía de venganza”.
La verdad es que Twitter prohíbe desde hace ya algunos años la “conducta sexual violenta” y las “escenas sangrientas gratuitas”, bajo excepciones muy puntuales y no tiene que ver con la actualización de los Términos de Servicio o de la Política de Privacidad.
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