Los ganaderos en Morelos han mostrado su preocupación ya que las vacas podrían morir de hambre, ante el incremento de precio en el alimento.
De acuerdo a Roberto Reza Quiroz, los pequeños ganaderos podrían sacrificar a sus animales y comer su carne si el precio de los granos para alimentarlas no se reduce.
Los ganaderos en Morelos han mostrado su preocupación ya que las vacas podrían morir de hambre. Ya que su alimento ha tenido un aumento del más del 40 por ciento, todo ello derivado de la actual pandemia de Covid-19.
Además, ha reducido el precio de oferta de la carne de res, según micro empresarios pertenecientes a este ramo.
Reza Quiroz especificó que el maíz, el cual costaba 4 mil 500 pesos por tonelada antes de la pandemia, ahora, aumentó a 7 mil pesos.
Esta situación ha ocasionado que ganaderos como Rodrigo, un productor del municipio de Tlaquiltenango les esté dando a sus vacas hierba seca almacenada de un año anterior, mejor conocido como rostrojo.
Aunado a esto, los empresarios destacan que varias cosechas se han perdido debido a la falta de comercios para vender sus mercancías, los cuales han sido cerrados de acuerdo a las medidas preventivas de sana distancia.
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