El Día Internacional de la Niña se busca trabajar para que todas las niñas tengan más oportunidades de aprendizaje, empoderarlas y trazar nuevos caminos
Se estima que mil millones de jóvenes, 600 de los cuales son niñas adolescentes, entrarán en el mercado laboral en la próxima década.
Más del 90 por ciento de estas niñas viven en países en desarrollo y trabajarán en el sector no estructurado, con sueldos bajos o sin cobrar, donde el abuso y la explotación laboral son muy comunes.
El lema de este año del Día Internacional de la Niña es “Mi voz, nuestro futuro en común”, con la intención de aprovechar la oportunidad para reimaginar un mundo mejor con la inspiración de las niñas adolescentes; un mundo en el que se sientan motivadas y gocen de reconocimiento, en el que se las tenga en cuenta y se invierta en ellas.
Esto, en un escenario en el que el progreso de las adolescentes no ha ido a la par con las realidades a las que se enfrentan hoy en día, y la COVID-19 ha empeorado aún más estas brechas.
Porque, si la pandemia del COVID-19 ha causado una profunda conmoción en nuestras economías y sociedades, ha subrayado la dependencia que la sociedad tiene de las mujeres, tanto en primera línea como en el hogar, al tiempo que ha puesto de manifiesto las desigualdades estructurales, ya sea en lo económico, lo sanitario, la seguridad o la protección social.
En este contexto, más de 11 millones de niñas podrían no volver a la escuela después de la crisis de la COVID-19. Esta alarmante cifra no solo amenaza décadas de progreso hacia la igualdad de género, sino que también pone a las niñas de todo el mundo en riesgo de embarazos adolescentes, matrimonios precoces y forzados, y violencia.
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La educación de las niñas es un salvavidas para ellas, pero también es una de las inversiones más poderosas que podemos hacer para nuestro futuro.
El efecto dominó de cambio positivo que ocurre cuando una niña recibe una educación es sorprendente. Fortalece las economías, reduce la desigualdad y crea más oportunidades para que todos tengan éxito.
Por esto, el Día Internacional se busca trabajar para que todas las niñas tengan más oportunidades de aprendizaje, para trazar nuevos caminos para ellas y hacer un llamamiento a la comunidad mundial para pensar cómo podemos preparar a estas jóvenes para que entren con éxito en el mundo laboral.
En 2020 se conmemora el veinticinco aniversario desde la adopción de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing: la agenda global para promover los derechos y el empoderamiento de las mujeres y las niñas a nivel mundial.
Junto a esta guía se unen otros esfuerzos como puede ser Generación Igualdad , una campaña que se lanzó a principios de 2020 y que abarca varios años. Un programa por una acción audaz sobre la igualdad de género con una narrativa clara y acciones relacionadas con las necesidades y oportunidades de las adolescentes, así como posibles soluciones a sus problemas.
IPR
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