El siniestro comenzó en torno de las 05:00 am de este viernes. Testigos indicaron que una fuerte explosión sacudió las habitaciones
Al menos cinco pacientes con coronavirus han fallecido tras un incendio en un ala de atención especializada del Instituto Matei Bals de Enfermedades Infecciosas de la capital de Rumanía, Bucarest.
De acuerdo con medios locales, cuatro de los pacientes murieron carbonizados, y una quinta víctima falleció después de que los procedimientos reanimación acabaran fracasando. Se trata de una mujer de 80 años que había sufrido quemaduras en el 20 por ciento del cuerpo.
‘Romania Journal’ señala que no hay información adicional sobre las otras cuatro víctimas mortales, pendientes de identificación.
Según los primeros reportes, el siniestro comenzó en torno de las 05:00 am (hora local) de este viernes. Testigos indicaron que una fuerte explosión sacudió las habitaciones donde los pacientes descansaban.
El incendio ha dejado otros 36 heridos, cuatro de ellos en estado grave, ingresados en cuidados intensivos.
Además, la detonación provocó daños en las habitaciones, en el pasillo, en los baños y en uno de los balcones.
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Por el momento, la Fiscalía nacional investiga dos posibles causas. La primera es el fallo en un calentador eléctrico instalado por los familiares de un paciente. La segunda es un cortocircuito en un enchufe múltiple, conectado a una bombona de oxígeno, que un paciente aprovechó para cargar su móvil y una tableta electrónica.
En entrevista con medios, el exdirector del Instituto Matei Bals, Adrian Streinu Cercel detalló que el hospital fue construido en 1953. Sin embargo, dijo, fue rehabilitado recientemente, y tenía todos los permisos en su lugar, con la última línea de oxígeno instalada en diciembre.
Un equipo de fiscales se presentó en el lugar de los hechos para poner en marcha una investigación sobre las causas del fuego.
Cabe destacar que el presidente rumano, Klaus Iohannis, ha solicitado una reforma integral del sistema sanitario del país, tras otras explosiones en el territorio.
El pasado 14 de noviembre, diez pacientes con coronavirus murieron y un médico tuvo que ser tratado en Bélgica de graves quemaduras tras incendiarse la unidad de cuidados intensivos del hospital provincial de Piatra Neamt, en el noreste de Rumanía.
En una investigación llevada a cabo en diciembre, las autoridades encontraron cerca de dos mil deficiencias en los sistemas antiincendio de las unidades de cuidados intensivos de los hospitales del país. También se tiene constancia de otros dos incendios desde entonces, aunque no arrojaron víctimas mortales.
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CAB
