Los estudiantes exigen el cese de los casos de violencia y acoso, así como la destitución del director de la Facultad de Artes y Diseño.
Decenas de estudiantes marcharon en Ciudad Universitaria desde esta mañana, para exigir la destitución de Mauricio de Jesús Juárez Servín, director de la Facultad de Artes y Diseño (FAD), manifestantes aseguran que ha sido omiso y negligente ante denuncias de acoso e intimidación por autoridades del plantel.
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Aunque la semana pasada los alumnos de la facultad exhortaron a otros estudiantes a manifestarse de forma pacífica, en poco tiempo la protesta se tornó violenta cuando integrantes del Bloque Negro realizaron pintas, agredieron al personal de seguridad e intentaron incendiar las puertas de la Rectoría.
Al movimiento se sumaron varios colectivos estudiantiles de otras Facultades, integrantes de la Central de Estudiantes Universitarios, del Colegio de Ciencias y Humanidades, Preparatorias y grupos de alumnos a favor de la causa.
Los líderes de la marcha denominada “Marcha de los Bigotes” informaron a medios de comunicación que además de la renuncia del director de la FAD, se manifestaron en contra de la corrupción, negligencias, burocracia, represión, criminalización y transparencia dentro de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Remarcaron que al momento el rector de la máxima casa de estudios, Enrique Graue Wiechers, tampoco ha atendido el problema de acoso y violencia de género que sufren sus compañeras y compañeres de identidades trans.
Los activistas también exigieron ofrecer servicios gratuitos de comedor, transporte y vivienda para estudiantes en situación vulnerable. De igual forma protestaron por la de imposición de Juárez Servín a recandelarizar las clases presenciales.
Entre consignas como: “¡La educación no se vende, se defiende!” y “¡Estudiante consciente se une al contingente!”, avanzaron por todo el circuito universitario lanzando pintura a diferentes edificios.
A su paso también agredieron a personal de seguridad y, cuando llegaron a la Torre de Rectoría, rociaron gasolina y prendieron fuego a la puerta.
Media hora después los encapuchados se dispersaron y terminó el movimiento.
