Para la tasa de interés, se proyecta un cierre de 8.0%, superior al 7.0% anticipado.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público SHCP mantiene su proyección de crecimiento económico para 2025, estimando un rango de entre 2.0% y 3.0%, con un crecimiento puntual del Producto Interno Bruto (PIB) de 2.3%, ligeramente inferior al 2.5% esperado en 2024.
Según los Criterios Generales de Política Económica 2025, se ajustaron las expectativas macroeconómicas: la inflación se estima en 3.5%, por encima del 3.3% previsto anteriormente, mientras que el tipo de cambio se calcula en 18.5 pesos por dólar, frente al estimado previo de 18 pesos. Para la tasa de interés, se proyecta un cierre de 8.0%, superior al 7.0% anticipado.
En cuanto a la producción petrolera, se espera alcanzar un volumen diario de un millón 891 mil barriles, con un precio promedio de 57.8 dólares por barril.
La Ley de Ingresos de la Federación 2025 estima un ingreso total de 8 billones de pesos, impulsado principalmente por la recaudación tributaria, que se prevé alcance los 5.3 billones, representando un incremento real del 3.3% respecto a 2024 y alcanzando por primera vez el 14.6% del PIB. Por su parte, los ingresos petroleros se proyectan en 1.14 billones de pesos, con un aumento real del 4.3%. Estos avances se planean lograr sin implementar nuevos impuestos ni aumentar los actuales.
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El gasto total para 2025 asciende a 9.22 billones de pesos, lo que representa una disminución real del 1.9% en comparación con 2024. Esta reducción responde a un ajuste del 3.6% en el gasto programable, incluyendo una caída del 14% en inversión pública, aunque se seguirá apoyando la infraestructura ferroviaria. También habrá un recorte del 3.9% en gasto corriente, mientras que el presupuesto para pensiones incrementará un 4.8%.
En este marco, el gobierno federal busca avanzar en la consolidación fiscal, reduciendo el déficit presupuestario del 5.0% del PIB en 2024 al 3.2% en 2025, lo que permitirá mantener la deuda pública en un nivel manejable del 51.4% del PIB. Además, se proyecta un techo de endeudamiento interno de 1.58 billones de pesos.
