
La artista trans colombiana fue una figura clave en la escena electrónica y en la lucha por la visibilidad LGBTI+.
Camila Gil, destacada DJ colombiana y reconocida activista trans, falleció a los 29 años, según informó su familia el jueves 5 de junio a través de un comunicado compartido en redes sociales. Su deceso ha conmocionado a la escena electrónica y a la comunidad LGBTI+ del país, donde era considerada un referente de autenticidad, arte y lucha social.
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El mensaje difundido por sus seres queridos la describió como una persona cuya “energía, luz y valentía transformaron vidas”, recordando su impacto tanto en la música como en el activismo. “Fue un símbolo de libertad, resistencia y representación”, afirmaron.
Aunque aún no se ha confirmado oficialmente la causa de su muerte, allegados indican que en los días previos presentó complicaciones respiratorias severas. Algunas versiones no oficiales sugieren que su estado de salud podría haberse visto agravado por el uso de vapeadores, y mencionan una posible infección pulmonar como factor determinante. Hasta el momento, la familia no ha emitido información médica concluyente.
Horas antes de su fallecimiento, se publicó una historia en su cuenta de Instagram pidiendo oraciones por su recuperación, lo que generó preocupación entre sus más de 400 mil seguidores.
Camila Gil contaba con más de una década de trayectoria en la música electrónica, destacándose en géneros como techouse, circuit y guaracha. Fue una de las primeras mujeres trans en alcanzar notoriedad en escenarios tanto nacionales como internacionales, convirtiéndose en un ícono para nuevas generaciones.
Su legado trasciende lo artístico. Al compartir de manera abierta su proceso de transición, Camila inspiró a miles de personas trans en Colombia y Latinoamérica. En su memoria, amigos, colegas y seguidores preparan homenajes para celebrar su vida y obra.
Con información de Excelsior