Un espectáculo impropio frente a un colegio desata críticas y una intervención policial
En junio, una pareja en Taichung, Taiwán, decidió festejar la graduación de su hijo de secundaria de manera muy poco convencional: contrataron a dos bailarinas de pole dance para realizar una presentación justo afuera de la Escuela Secundaria Municipal Wanhe, poco después de que los alumnos salieran del acto protocolario.
Durante varios minutos, las bailarinas actuaron inicialmente a nivel de calle y luego subieron a los techos de dos camionetas SUV, donde continuaron el espectáculo desde postes instalados, captando la atención de estudiantes, padres y transeúntes, quienes reaccionaron con sorpresa e incredulidad.
Uno de los momentos más incómodos fue cuando el graduado, un niño llamado para participar entre las artistas, se mostró visiblemente avergonzado. A pesar de ello, explicó que no objetó la sorpresa por entender las buenas intenciones de su madre.
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La madre reconoció que la idea fue organizada por un amigo y coreografiada por ella misma, con la intención de que su hijo recibiera un regalo de graduación memorable y diferente a los de otros padres. “Quería destacar entre los demás”, declaró, convencida de que estaba haciendo algo especial.
Sin embargo, tanto algunos padres como autoridades escolares reprobaron el evento. Un padre lo calificó como “inapropiado frente a una secundaria”, y un vocero del plantel anunció que reforzarán la orientación a las familias para celebrar de forma más adecuada y sin excesos. La policía, por su parte, intervino para dispersar al público y garantizar el orden público.
