
Las rejas curvas en ventanas no solo son un toque decorativo en fachadas coloniales; este diseño ofrece seguridad, ventilación y funcionalidad en el hogar
Al caminar por calles de barrios antiguos en Ciudad de México, Puebla, Guadalajara o en cascos históricos de diversas ciudades de Europa y América Latina, es común encontrar rejas de ventana con una forma abombada que llama la atención. Estas estructuras, conocidas como “rejas con panza” o “vientre de abuela”, poseen un diseño que va más allá de lo estético, pues su origen está vinculado a razones de funcionalidad, seguridad y tradición.
Estas rejas redondeadas no solo embellecen fachadas de estilo colonial o mediterráneo, sino que añaden un valor patrimonial a las viviendas, manteniendo una armonía visual que realza el carácter de cada calle donde se instalan. Además de su atractivo artesanal, su forma abombada brinda un nivel de protección extra frente a posibles intrusos, ya que su proyección hacia el exterior dificulta que alguien pueda escalar o manipularlas con facilidad, al no contar con puntos de apoyo firmes para pies o manos.
Te puede intersar: El origen real de los cacahuates japoneses en México
Otro de los beneficios prácticos de este diseño es que al crear un espacio entre la ventana y la reja, permite colocar macetas, jardineras o incluso equipos de aire acondicionado sin bloquear la entrada de luz o la ventilación, ideales para quienes buscan mantener espacios verdes en casa sin comprometer la seguridad. En zonas cálidas o húmedas, estas rejas ayudan a mejorar la circulación del aire y permiten una mayor entrada de luz natural, lo que incrementa la comodidad en el hogar.
Históricamente, este tipo de rejas surgió en una época en la que las casas carecían de patios traseros o sistemas de aire acondicionado, por lo que las ventanas se convertían en espacios de interacción con la calle. Desde allí, los habitantes podían asomarse a observar o conversar con los vecinos de forma segura, sin temor a accidentes o al acceso fácil desde el exterior.
Además, este tipo de estructura favorece la protección de los marcos de las ventanas, ya que permite la instalación de pequeñas repisas o cubiertas que desvían el agua de lluvia, evitando que se filtre hacia el interior o deteriore la madera. Con ello, se reduce la humedad y se preserva la integridad de la vivienda.
Las rejas abombadas representan una combinación de funcionalidad, tradición y estética. Son un elemento que ha perdurado en el tiempo, demostrando que un diseño arquitectónico inteligente puede contribuir a la seguridad, la comodidad y la conservación del hogar, mientras mantiene viva la identidad visual de los espacios en los que se encuentran.