
Un operativo conjunto de la Defensa y Protección Civil permitió evacuar a 40 personas atrapadas en la presa Garabitos, Durango, tras la crecida del arroyo de Copala.
Un total de 40 personas que se encontraban de paseo en la presa Garabitos, en Durango, fueron rescatadas por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional y la Coordinación Estatal de Protección Civil, luego de que la creciente del arroyo de Copala, también conocido como San Jorge, les impidiera salir del lugar en sus vehículos.
De acuerdo con el coordinador estatal de Protección Civil, Arturo Galindo Cabada, el aumento del nivel del agua dejó varados a los visitantes y obligó a desplegar un operativo emergente. La salida se realizó de manera controlada a través del puente del tren, que fue habilitado como ruta alterna para garantizar el retorno seguro de las familias.
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El funcionario informó que, debido a la situación, el acceso a la presa Garabitos permanecerá cerrado mientras continúe la temporada de lluvias, con el fin de evitar que otras familias se expongan a un riesgo similar. Durante la tarde del 16 de septiembre, al menos 12 vehículos quedaron atrapados en la zona al no poder cruzar de nuevo el arroyo, lo que obligó a evacuar a los paseantes mediante la estrategia de rescate.
“Derivado de las fuertes lluvias que se presentaron la tarde del martes 16 de septiembre, cuando menos 12 vehículos quedaron varados en la presa Garabitos al no poder cruzar de regreso el arroyo de Copala, también conocido como arroyo de San Jorge, lo que provocó que estas familias tuvieran que ser evacuadas a través de un puente del tren”, explicó Galindo Cabada.
Gracias a la intervención coordinada de ambas dependencias, niños y adultos fueron retirados de la zona sin incidentes mayores. “Afortunadamente esto no pasó a mayores, las familias pudieron regresar a sus casas”, destacó el titular de Protección Civil, quien pidió a la ciudadanía extremar precauciones durante la temporada de precipitaciones.
Inundaciones en Canatlán
De manera paralela, Protección Civil estatal activó un operativo en la comunidad Anáhuac, municipio de Canatlán, donde las intensas lluvias provocaron inundaciones la madrugada del miércoles. El balance preliminar señala afectaciones en 12 viviendas y alrededor de 65 personas damnificadas.
Arturo Galindo Cabada recorrió la zona junto con personal municipal y explicó que se abrirá una sangría y se utilizarán motobombas para desalojar el agua. Además, la Comisión del Agua del Estado de Durango enviará un hidrojet para atender el drenaje domiciliario colapsado.
El DIF Estatal también participará en las labores de apoyo al entregar paquetes alimentarios, mientras que Protección Civil reforzará las acciones con materiales de limpieza y costaleras para contener el ingreso de agua.