
Una caravana de migrantes llegó a Huixtla tras caminar de madrugada; algunos sufren deshidratación y exigen documentos para trabajar en México.
Con pancartas y consignas en favor de la regularización, la nueva caravana de migrantes alcanzó el municipio de Huixtla, Chiapas, luego de caminar durante la madrugada por segundo día consecutivo. En el trayecto, se reportaron casos de deshidratación, principalmente entre mujeres y algunos niños, aunque recibieron apoyo del grupo Beta Sur, que distribuyó bebidas hidratantes.
Las autoridades de salud locales recomendaron a los migrantes no exponerse a la corriente del río cercano al lugar donde pasaron la noche. De acuerdo con los organizadores, está previsto que la caravana reanude su marcha el viernes rumbo al siguiente municipio.
Una nueva salida desde Tapachula
El grupo partió el miércoles de Tapachula, en la frontera con Guatemala, portando una pancarta con la frase: “Con papeles podemos aportar más a México. Papeles, no persecusión”. Durante su recorrido por carretera, agentes del Instituto Nacional de Migración observaron el avance del contingente.
Entre los testimonios, Jorge Luis Rivera, migrante cubano de 56 años, explicó a la AFP que ya no busca llegar a Estados Unidos, sino establecerse en México: “Decidimos ir para arriba (a Ciudad de México) para mejorar un poquito. No pagan bien; yo estaba trabajando con otro cubano y me pagaban de a 120 pesos el día”. Rivera añadió que su aspiración es obtener residencia legal para hacer vida en el país.
En la misma línea, Rebeca García, también de origen cubano y con 26 años de edad, señaló: “No nos dan papeles, no nos dan legalidad y no tenemos trabajo”.
México, nuevo destino
La falta de oportunidades y el endurecimiento de las políticas migratorias en Estados Unidos han convertido a México en un destino alternativo para cientos de migrantes. La situación se acentuó tras el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, con medidas más estrictas en la frontera.
De acuerdo con el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), a finales de septiembre se reportó que más de dos millones de migrantes en situación irregular abandonaron Estados Unidos, ya sea de manera forzada o voluntaria, desde que Trump asumió nuevamente la presidencia en enero.