
El Tribunal de Disciplina revisa expedientes del anterior Consejo de la Judicatura; la presidenta del Poder Judicial en Tamaulipas, Tania Contreras asegura que ya se han presentado nuevas denuncias.
El Poder Judicial de Tamaulipas enfrenta un proceso interno de depuración. La magistrada presidenta Tania Gisela Contreras López confirmó que varios exjueces se encuentran bajo investigación por presuntos actos de corrupción y negligencia en el ejercicio de sus funciones, dentro de los expedientes que actualmente revisa el Tribunal de Disciplina Judicial.
“Ya se está revisando el caso por el Tribunal de Disciplina. Están recibiendo las situaciones heredadas del anterior Consejo de la Judicatura, los expedientes, y sí, hay personas que están bajo investigación”, precisó Contreras.
Aunque la presidenta no reveló el número exacto de implicados, reconoció que las denuncias comenzaron a recibirse desde el 1 de octubre, lo que marca el inicio de un proceso de revisión de fondo en los juzgados del estado.
“Se están dando entradas a las denuncias que se han presentado a partir del primero de octubre”, añadió.
Negligencia, abuso y rezago judicial
De acuerdo con la magistrada, los señalamientos no solo se limitan a casos de corrupción, sino también a negligencias graves en la impartición de justicia. Algunos exjueces habrían incurrido en omisiones al resolver casos, retardos injustificados en sentencias y trato indebido hacia su propio personal o hacia los litigantes.
“En algunas ocasiones tenemos los señalamientos del propio personal de los juzgados, cuando ha habido un trato indebido hacia sus compañeros o situaciones que derivan en rezagos que afectan directamente a los usuarios”, explicó.
Contreras López destacó que el rezago judicial es uno de los principales retos actuales, sobre todo en las salas civiles y familiares, donde se concentra el mayor número de quejas y demoras en la resolución de expedientes.
Depuración institucional y transparencia
Las investigaciones representan un primer paso en el proceso de rendición de cuentas dentro del Poder Judicial de Tamaulipas, un órgano que durante años fue señalado por opacidad y presunto favoritismo político en la designación de jueces y magistrados.
Fuentes judiciales consultadas por Veritas MX confirmaron que parte de los expedientes en revisión provienen de administraciones anteriores, y que las auditorías internas apuntan a irregularidades en resoluciones, uso de recursos y conflictos de interés con despachos privados.
Contreras López aseguró que su administración mantendrá una política de “tolerancia cero” ante la corrupción judicial, y que el Tribunal de Disciplina actuará conforme a derecho, sin influencias políticas ni presiones internas.
“No se trata de una cacería de brujas, sino de limpiar la casa. El Poder Judicial debe recuperar la confianza de los ciudadanos”, expresó una fuente cercana a la presidencia del Tribunal.
Una institución bajo la lupa
El Poder Judicial tamaulipeco ha sido objeto de múltiples cuestionamientos en los últimos años, especialmente por su presunta cercanía con gobiernos anteriores y por las irregularidades detectadas en nombramientos, sentencias y asignaciones.
El nuevo Consejo busca fortalecer los mecanismos de control interno, evaluación de desempeño y sanción, mientras el Tribunal de Disciplina revisa los expedientes con el acompañamiento del Órgano de Control Interno del propio Poder Judicial.
Los resultados preliminares podrían darse a conocer antes de que concluya el año. De comprobarse las faltas, los responsables enfrentarían inhabilitaciones, sanciones administrativas e incluso denuncias penales.
Un mensaje de advertencia
El proceso no solo busca sancionar, sino enviar un mensaje claro al interior de los tribunales: la corrupción judicial ya no será tolerada.
Mientras tanto, la ciudadanía espera que las acciones no se queden en declaraciones. Las víctimas de un sistema lento y politizado claman por justicia pronta, imparcial y transparente.
El reto es mayúsculo: reconstruir la confianza en los jueces de un estado históricamente golpeado por la impunidad.