
El atentado ocurrió cuando una camioneta cargada con explosivos detonó frente a la comandancia de la Policía Comunitaria.
Capturan a seis en Colima por presunta relación con explosión de coche bomba en Michoacán. Autoridades detuvieron en Colima a seis hombres que serían investigados por su posible participación en el atentado con coche bomba ocurrido en el municipio de Coahuayana, Michoacán, el cual dejó un saldo de seis personas fallecidas. La captura se realizó tras un operativo encabezado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), que permitió ubicar un campamento clandestino en la franja limítrofe entre ambos estados.
Según información del gobierno de Colima, la acción derivó en el desmantelamiento de un campamento delictivo y la aprehensión de los sospechosos en la comunidad de Chamila, municipio de Ixtlahuacán. En el operativo participaron elementos de la V Región Militar y de la 20ª Zona Militar, con respaldo de autoridades estatales, instancias de seguridad y justicia, así como de la Guardia Nacional. Durante la intervención se aseguraron armas de fuego, municiones, presunta droga, equipo táctico y diversos objetos relacionados con actividades ilícitas.
El despliegue se enmarca en el Plan Michoacán, anunciado recientemente por el gobierno federal, que contempla la coordinación entre fuerzas federales y el gobierno de Colima para reforzar la seguridad en la región.
Los detenidos, junto con el material asegurado, fueron puestos a disposición del Ministerio Público, que continuará con las investigaciones para determinar las operaciones del campamento y esclarecer si existe un vínculo directo con el ataque registrado el 6 de diciembre en Coahuayana u otros hechos delictivos en la zona.
El atentado ocurrió cuando una camioneta cargada con explosivos detonó frente a la comandancia de la Policía Comunitaria, generando una fuerte onda expansiva que causó daños a viviendas, comercios y al hospital comunitario, además de provocar pánico entre la población de la costa michoacana.
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Autoridades federales confirmaron que la explosión dejó seis muertos, entre ellos elementos de la Policía Comunitaria y dos ocupantes del vehículo utilizado en el ataque, así como varios lesionados que fueron trasladados a hospitales. La Fiscalía General de la República (FGR) inició una carpeta de investigación por delincuencia organizada y desplegó un grupo especializado de peritos y policías ministeriales para analizar los restos del explosivo, el vehículo y otros indicios.
Aunque en un inicio se manejó la posibilidad de un acto terrorista, la clasificación del caso fue modificada conforme avanzaron las indagatorias. Posteriormente, la Secretaría de Marina (Semar) reforzó la vigilancia en Coahuayana y municipios aledaños, además de activar protocolos de atención a víctimas y seguridad para la población.
Las investigaciones también arrojaron que la camioneta Dodge RAM Dakota negra utilizada en el atentado no tenía reporte de robo y había sido vendida meses antes, información clave para reconstruir su trayecto previo a la explosión, el cual, hasta ahora, se presume tuvo origen en Colima.







