Luego de un ataque con explosivos que sacudió a Cali y dejó seis muertos y cerca de 60 heridos, el alcalde de la ciudad ordenó la militarización del territorio como medida de seguridad.
Las autoridades responsabilizan del atentado a la disidencia más poderosa de la antigua guerrilla de las FARC, el Estado Mayor Central (EMC), liderado por alias Iván Mordisco.
La jornada del jueves fue una de las más violentas que ha vivido Colombia en los últimos años, con dos ataques armados que dejaron un saldo total de 14 muertos y decenas de heridos.
El hecho más grave ocurrió alrededor de las 3:00 de la tarde, cuando un camión cargado con explosivos fue detonado en una zona transitada de Cali, frente a una escuela de aviación militar. La explosión provocó una gran destrucción: vehículos incendiados, viviendas colapsadas y ciudadanos heridos o huyendo en medio del caos, según se observa en videos difundidos en redes sociales.
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El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, atribuyó la autoría del ataque al Estado Mayor Central, una de las principales facciones disidentes de las FARC.
Horas antes, otro ataque se registró en el noroeste del país, donde un grupo armado dirigido por alias Calarcá atacó a una unidad policial encargada de labores de erradicación de cultivos ilegales.
