
Las palabras de Aldo de Nigris en un reality despertaron interés en la demisexualidad, una orientación donde el deseo surge con un vínculo emocional
En medio de la exposición mediática de La Casa de los Famosos México, Aldo de Nigris, exfutbolista y finalista del programa, llamó la atención del público no solo por su estrategia reservada dentro del juego, sino por una revelación personal que motivó un amplio debate en redes sociales.
Durante una charla con otros concursantes, el exdelantero comentó que no se considera una persona “muy sexual” a menos que exista un lazo afectivo importante. “Tiene que gustarme mucho alguien, debe haber un vínculo para que sienta algo así”, expresó ante las cámaras. Aunque no mencionó etiquetas, sus palabras fueron asociadas por muchos usuarios con la demisexualidad, un concepto todavía poco conocido por gran parte de la audiencia.
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La demisexualidad se enmarca dentro del espectro asexual y se define como la atracción sexual que solo aparece cuando existe una conexión emocional profunda con la otra persona. A diferencia de lo que ocurre con el llamado “amor a primera vista”, quienes se identifican con esta orientación no experimentan atracción física de inmediato. No se trata de falta de deseo, sino de un modo distinto de vivir la intimidad.
En este contexto, especialistas y defensores de la diversidad sexual insisten en que comprender la demisexualidad ayuda a romper estigmas. Aún existen mitos como creer que implica abstinencia, celibato, timidez o inseguridad, cuando en realidad es una orientación legítima. Además, sí existe deseo sexual, pero aparece bajo condiciones emocionales específicas.
Para algunas personas, identificar esta orientación implica notar que la atracción física llega solo después de conocer bien a alguien, que las aplicaciones de citas resultan impersonales o que la confianza emocional es un requisito antes de pensar en lo físico. También es común que el interés surja únicamente tras desarrollar un vínculo sólido.
Que una figura pública como Aldo de Nigris aborde el tema en un entorno donde predominan historias de atracción rápida resulta relevante. Su comentario permitió que muchas personas se reconocieran en su experiencia y vieran su manera de sentir como algo válido. Aunque etiquetarse no es una obligación, conocer el término puede ser útil para entenderse mejor y comunicar las propias necesidades afectivas.
En el caso del exfutbolista, su testimonio no buscó generar controversia, sino dejar claro que, para él, la conexión emocional es la base de cualquier acercamiento íntimo. Una declaración que amplía la conversación sobre la diversidad de formas en que el deseo puede manifestarse.