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Alfonso Durazo tuvo una áspera comparecencia en el Senado de la República

Durazo Montaño afirmó que el actual gobierno lleva a cabo un proceso para cambiar radicalmente el modelo de uso de la fuerza policial y militar

Con mantas y un muñeco de peluche de “Pinocho”, senadores del PAN cuestionaron las diversas declaraciones del secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC), Alfonso Durazo, respecto al operativo Culiacán.

En el marco de su comparecencia ante la Comisión de Seguridad Pública del Senado, una decena de legisladores blanquiazules se colocaron abajo de la tribuna con mantas y cartulinas con diferentes frases y otra con la imagen del personaje de Disney.

El funcionario federal se presentó ante la comisión que preside la senadora Lucía Trasviña Waldenrath, como parte del análisis del Primer Informe de Gobierno.

La senadora blanquiazul, Indira de Jesús Rosales, cuestionó a Alfonso Durazo las diversas versiones que se dieron por su parte y las inconsistencias del operativo del 17 de octubre en Culiacán, Sinaloa, donde se capturó y dejó en libertad al hijo de “El Chapo” Guzmán, Ovidio Guzmán López.

Al término de su participación, De Jesús Rosales entregó sus preguntas a Durazo y un muñeco de “Pinocho” que no fue recibido por el funcionario.

El peluche fue tomado y arrullado por la presidenta de la Comisión de Seguridad Pública, quien en plan mediador y ante la gritería de los panistas apuntó: “me gustó el pinocho para mi nieto. Ya se lo guardé”.

Un poco antes de estos cuestionamientos y protesta, Alfonso Durazo, argumentó que la información parcial que al principio se expuso fue la disponible en ese momento, “pero los hechos cambiantes por instantes modificaron la información proporcionada a la opinión pública, pero, jamás hubo dolo”.

Además, que los hechos cambiantes modificaron los datos proporcionados a la opinión pública, pero jamás hubo dolo, pues la prioridad en ese momento era la decisión que a tomar para evitar que aquello se convirtiera en un episodio de guerra y derramamiento de sangre inocente.

Durazo Montaño reconoció que después de lo ocurrido en Culiacán están obligados a revisar y ajustar protocolos de actuación. Sin embargo, subrayó, lo que está en el fondo es el debate sobre dos visiones distintas: la de quienes quieren combatir a la delincuencia organizada a toda costa, caiga quien caiga, y “la de quienes pensamos que ya fue suficiente el derramamiento de sangre que desde hace años padecemos”.

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