Francia vive un nuevo fin de semana de protestas de los “chalecos amarillos”, el décimo cuarto consecutivo, en el que se temían disturbios, pese a que la movilización ha ido menguando últimamente
Un automovilista que se vio atrapado en una manifestación de “chalecos amarillos” en Ruan, Francia, este sábado alrededor de las 16:30, forzó el paso de su vehículo y molestó a varias personas, causando 3 heridos.
A bordo del automóvil iban un hombre, una mujer y su bebé, los cuales se asustaron cuando las personas montaron el cofre y les lanzaron proyectiles, por lo que aceleró intentando huir de la multitud.
“El conductor que intenta huir ha derrocado a tres (…) personas”, dijo el secretario general de la prefectura Yvan Cordier, quien habló de los heridos “con relativa urgencia”.
Aunque se había hablado de una cuarta persona herida que había informado de la prefectura al principio, finalmente dijo que “no tiene relación con el vehículo”.
Tras los hechos, los manifestantes formaron un cordón alrededor de los heridos para protegerlos. Se les dieron primeros auxilios antes de que fueran transportados al Hospital Universitario de Rouen. Estos son hombres que sufren de “trauma leve”, según los bomberos. El conductor se fue por temor a ser linchado, dijo la policía. Él mismo fue a la estación de policía donde todavía estaba haciendo una declaración.
Así, Francia vive un nuevo fin de semana de protestas de los “chalecos amarillos”, el décimo cuarto consecutivo, en el que se temía que, como en los anteriores, se registraran disturbios pese a que la movilización ha ido menguando últimamente.
? #France ℹ #Rouen: A Car rams into crowd of people at #GiletsJaunes rally in
‘multiple people wounded’#ActeXIV #YellowVests #GJ #Resistance #16February pic.twitter.com/QuHSddFd3F
— Compact News (@NewsCompact) 16 de febrero de 2019
En vísperas de que este domingo se cumplan los tres meses del inicio el 17 de noviembre de este movimiento, que reivindica medidas en favor del poder adquisitivo y denuncia la política del Presidente, Emmanuel Macron, en la jornada de este sábado están previstas concentraciones en al menos una veintena de ciudades del país.
En París, se han lanzado varias convocatorias en diferentes puntos con mensajes variados, como uno en el que se hace un llamado a “insurrecciones” y a bloquear “el mayor tiempo posible” la plaza de la Estrella, donde se encuentra el Arco del Triunfo, al final de la avenida de los Campos Elíseos.
Para el domingo también hay otra cita, en este caso declarada y de voluntad “pacífica“, que debería salir de los Campos Elíseos para terminar en el Campo de Marte, a los pies de la torre Eiffel.
La Prefectura de Policía de París señaló que los manifestantes tendrán enfrente un dispositivo de seguridad “consecuente”.
Según las cifras del Ministerio del Interior, las protestas en las últimas semanas no solo están muy lejos de las cerca de 290 mil personas que reunieron en su primera edición del 17 de noviembre en todo el país, sino que han ido perdiendo fuerza en términos de movilización.
De acuerdo con Interior, el pasado día 9 de febrero salieron a la calle 51 mil 400 manifestantes, frente a los 84 mil del 12 de enero. No obstante, los “chalecos amarillos” rechazan esos datos y afirman que el pasado sábado fueron 118 mil 200 en las protestas.
El instituto demoscópico Elabe, en un sondeo publicado el pasado miércoles, señalaba que por primera vez desde que comenzaron las protestas hay una mayoría de franceses (un 56 por ciento) que quieren que el movimiento termine. Para un 64 por ciento de los encuestados, las manifestaciones se han alejado de las reivindicaciones iniciales.
Uno de los aspectos que ha favorecido el aumento de los que se oponen a los “chalecos amarillos” son los actos de violencia que, según contó el pasado martes el primer ministro, Édouard Philippe, ya han dado lugar a mil 796 condenas.
En tres meses, la Policía y la Gendarmería ha procedido a realizar siete mil 500 detenciones en unas concentraciones que están teniendo impacto económico, sobre todo en el comercio y en el turismo.
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