La estricta medida que Bolivia adoptó, forma parte de la cuarentena por COVID-19, militares y policías vigilan que se cumpla y nadie esté en la calle
Italia vive una terrible situación por la pandemia de COVID-19, los países no quieren seguir ese camino y endurecen sus medidas de seguridad, tal es el caso de Bolivia.
El gobierno ordenó toque de queda para todos sus ciudadanos, serán doce horas diarias de limitación.
Para garantizar que se cumpla lo estipulado, se realizó un despliegue militar y policiaco, los elementos vigilarán las principales calles de Bolivia.
Con un megáfono, un policía recordó a los pocos ciudadanos que transitaban las calles en el centro de La Paz que “el comercio debe cerrar a las 3 de la tarde, el transporte público debe circular hasta las 4 y el privado hasta las 6 de la tarde. La medida se levanta a las 5 de la madrugada”.
A pesar de que en el país andino sólo hay 12 casos de COVID-19 y éste lleva en el territorio dos semanas, la medida se tomó para evitar que el coronavirus se extienda.
Para algunas personas el toque de queda es algo extremo y se resisten a obedecer, principalmente los pequeños comerciantes, pues viven al día, pero en televisión el ministro de Gobierno (Interior), Arturo Murillo, amenazó a quien no cumpla la ley.
“No vengan a hacerse los vivos (astutos), no vengan a hacerse los machitos (valientes), acá estamos para hacer cumplir la ley, esto no es política, es vida”, sentenció el ministro.
La medida estará activa hasta el 31 de marzo.
DMS
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