Britney Spears reaccionó con un mensaje cargado de ironía a una fotografía familiar navideña en la que aparece su hijo Sean Preston, reavivando tensiones
Britney Spears volvió a colocarse en el centro de la conversación pública luego de reaccionar, de forma irónica, a una fotografía navideña compartida en redes sociales por su familia, en la que aparece su hijo mayor, Sean Preston. La publicación reavivó las tensiones que la cantante ha expuesto en los últimos años respecto a su vínculo familiar.
La imagen, difundida durante las celebraciones decembrinas, muestra a Sean Preston, de 20 años, acompañado por su abuela Lynne Spears, su tía Jamie Lynn Spears y sus primas Maddie e Ivey. La ausencia de Britney en la postal no pasó desapercibida entre sus seguidores, quienes rápidamente relacionaron la fotografía con el mensaje que la artista compartió posteriormente.
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Mientras esa reunión tenía lugar, la intérprete de Toxic pasó las fiestas junto a su hijo menor, Jayden James, de 19 años, fruto de su matrimonio con Kevin Federline. De acuerdo con una fuente citada por People, la cantante disfrutó especialmente ese encuentro y vivió una Navidad significativa al lado de él.
“Britney se divirtió mucho celebrando la Navidad con Jayden; ha sido una festividad muy especial”, señaló la fuente.
Días después, el domingo 28 de diciembre, Britney publicó en Instagram una imagen de su árbol de Navidad acompañada de un mensaje que muchos interpretaron como una alusión directa a su familia. “Feliz Navidad atrasada a mi hermosa familia que nunca me ha faltado al respeto, lastimado, hecho algo completamente inaceptable o causado un trauma increíble, del tipo que no se puede arreglar…”, escribió. El texto continuó con un tono marcadamente sarcástico: “A mi querida, dulce e inocente familia… lo siento mucho por haber estado ocupada esta Navidad, pero definitivamente apareceré y los sorprenderé pronto… no puedo esperar”.
En el mismo mensaje, la cantante hizo una excepción al referirse a su sobrina Ivey, hija menor de Jamie Lynn, a quien dirigió palabras afectuosas, subrayando que su conflicto no involucra a los niños de la familia. “Solo quiero abrazarte, mi amor… buen viaje, amigos”, escribió.
La publicación, cuyos comentarios fueron desactivados, acumuló miles de reacciones en pocas horas y volvió a poner sobre la mesa las heridas emocionales que Britney ha señalado desde el fin de su tutela legal en 2021. Desde entonces, la artista ha hablado abiertamente del daño psicológico que asegura haber sufrido por parte de personas cercanas, incluidos algunos miembros de su familia.
La distancia con su entorno familiar no es reciente. En sus memorias The Woman in Me, publicadas en 2023, Britney reflexionó sobre su relación con su hermana menor. “Estoy trabajando para sentir más compasión que enojo hacia ella y hacia todos aquellos que siento que me han hecho daño. No es fácil”, escribió en el libro.
Por su parte, Jamie Lynn Spears ha sostenido en diversas ocasiones que siempre intentó apoyar a su hermana durante los años de la tutela, una versión que contrasta con el relato que Britney ha compartido tras recuperar su autonomía legal.
