
Una mujer en Estados Unidos presentó una demanda contra una empresa de cine tras llevar a su hijo a ver Lilo & Stitch, y ser sorprendidos con trailers de películas de terror que habrían afectado emocionalmente al menor.
En Florida, una madre ha decidido emprender acciones legales contra una reconocida cadena de cines luego de una experiencia que, asegura, causó un impacto negativo en su hijo. La mujer compró boletos para una función de Lilo & Stitch, cinta animada dirigida al público infantil, sin imaginar que antes de que comenzara la proyección, serían exhibidos avances de películas de horror con escenas violentas e imágenes perturbadoras.
De acuerdo con los documentos judiciales, el menor, de tan solo siete años, sufrió una fuerte reacción emocional al presenciar los trailers de filmes no aptos para su edad. La madre argumenta que el cine mostró contenido inapropiado sin advertencia previa, violando así las expectativas razonables de los asistentes sobre la programación familiar que se espera en una función infantil.
Entre los avances proyectados se encontraban escenas gráficas de películas como The First Omen y Imaginary, las cuales están clasificadas para audiencias mayores de edad. La mujer asegura que ni en la taquilla ni en la publicidad de la función se informó que estos trailers serían parte de la proyección, lo que la llevó a salir apresuradamente de la sala con su hijo.
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La demandante ha solicitado una compensación económica, argumentando negligencia por parte de la empresa y el daño psicológico ocasionado a su hijo. Además, pide que la cadena implemente medidas para evitar que este tipo de situaciones vuelvan a ocurrir, especialmente en funciones destinadas a menores.
Hasta el momento, la compañía de cines no ha emitido un comunicado oficial respecto a la demanda. El caso ha generado debate en redes sociales sobre la responsabilidad de los exhibidores al seleccionar el contenido que acompaña a películas infantiles.