Woods regresaba a casa para organizar su torneo de la PGA, el Genesis Invitational en Riviera Country Club, cuando ocurrió el accidente
Tiger Woods aceleró hasta 87 millas por hora (mph) cuando chocó su camioneta en el sur de California hace menos de dos meses, accidente que dejó a la superestrella del golf gravemente herida, reporttaron las autoridades este miércoles.
Woods conducía de 84 a 87 millas por hora antes del accidente en un tramo de carretera cuesta abajo en las afueras de Los Ángeles que tenía un límite de velocidad de 45 mph, reportó el Sheriff del condado de Los Ángeles, Alex Villanueva.
El tramo de la carretera es conocido por los accidentes y los conductores alcanzan velocidades tan altas que hay una salida de emergencia para vehículos fuera de control justo más allá del lugar donde se estrelló Woods.
En conferencia de prensa, Villanueva culpó del accidente del 23 de febrero únicamente a la velocidad excesiva y la pérdida de control de Woods al volante.
Por su parte, el capitán James Powers dijo que no había evidencia de que el golfista frenara durante el accidente y que se cree que Woods pisó el acelerador sin darse cuenta en lugar del pedal del freno.
Los detectives no buscaron órdenes de registro para las muestras de sangre de Tiger Woods, que podrían haber sido examinadas para detectar drogas o alcohol, o su teléfono celular. Los oficiales del alguacil dijeron que no había evidencia de deterioro o de conducción distraída.
Sin embargo, los investigadores buscaron en la grabadora de datos de la camioneta, conocida como caja negra, en los días posteriores al accidente.
No se emitieron citaciones de tráfico. El alguacil dijo que Woods dio permiso a las autoridades para revelar detalles sobre el accidente.
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Los documentos muestran que Woods les dijo a los agentes que no sabía cómo ocurrió el accidente y que no recordaba haber conducido. En el momento del accidente, Woods se estaba recuperando de una quinta cirugía de espalda, que tuvo lugar dos meses antes.
Woods, quien es originario del área de Los Ángeles, había regresado a casa para organizar su torneo de la PGA, el Genesis Invitational en Riviera Country Club, cuando ocurrió el accidente.
Conducía una camioneta que le prestaron el torneo cuando chocó contra una mediana elevada en Rolling Hills Estates, en las afueras de Los Ángeles. La camioneta cruzó dos carriles en sentido contrario y arrancó un árbol.
Actualmente, el atleta se encuentra en Florida recuperándose de múltiples cirugías, incluido un procedimiento prolongado para huesos rotos de tibia y peroné en la parte inferior de la pierna derecha en múltiples ubicaciones.
En las semanas posteriores al suceso de Woods, el alguacil lo llamó “puramente un accidente” y dijo que no había evidencia de deterioro. Villanueva enfrentó críticas por etiquetar la volcadura como un accidente antes de que concluyera la investigación.
Esta es la tercera vez que Woods participa en una investigación sobre un vehículo. El ejemplo más notorio fue cuando su SUV atropelló una boca de incendios y chocó contra un árbol temprano en la mañana después del Día de Acción de Gracias en 2009.
Ese accidente fue el comienzo de revelaciones impactantes de que había estado engañando a su esposa con varias mujeres. Woods perdió importantes patrocinios corporativos, fue a una clínica de rehabilitación en Mississippi y no volvió al golf durante cinco meses.
En mayo de 2017, la policía de Florida lo encontró dormido al volante de un automóvil estacionado torpemente al costado de la carretera. Fue arrestado por un cargo de DUI y dijo más tarde que tuvo una reacción inesperada a los medicamentos recetados para su dolor de espalda.
En ese entonces, Woods se declaró culpable de conducir imprudentemente y se registró en una clínica para obtener ayuda con medicamentos recetados y un trastorno del sueño.
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CAB
