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Conoce el movimiento feminista radical 4B de Corea del Sur

El movimiento feminista 4B en Corea del Sur constituye una fuerza activa en la batalla por la equidad de género y la defensa de los derechos de las mujeres.

El movimiento feminista 4B en Corea del Sur surge como respuesta a las profundas desigualdades de género y las discriminaciones arraigadas en la sociedad surcoreana durante décadas. Este movimiento, centrado en cuatro áreas fundamentales: “Cuerpo” (Body), “Nacimiento” (Birth), “Cama” (Bed) y “Pan” (Bread), aborda diversos desafíos que enfrentan las mujeres en el país.

En los últimos años, el movimiento 4B ha ganado impulso, en parte gracias a la novela “Kim Jiyoung, nacida en 1982” de la autora coreana Cho Nam-Joo. Esta obra se inspiró en la campaña “Escape The Corset”, realizada en 2017, que fue liderada por pioneras como Jeon Bora, quien fotografió a mujeres que se afeitaron la cabeza como un acto de rebeldía, y Summer Lee, quien se filmó a sí misma sin maquillaje y vistiendo ropa holgada e infantil.


El movimiento 4B se considera radical debido a sus cuatro principios fundamentales:

  1. Oposición al matrimonio heterosexual (Bihon)
  2. Rechazo al parto (Bichulsa)
  3. Negativa a salir en citas con hombres (Biyeonae)
  4. Rechazo de las relaciones sexuales heterosexuales (Biseksu)

Por lo tanto, los expertos sostienen que se trata de un movimiento ideológico y de estilo de vida que desafía las convenciones de feminidad y los rigurosos estándares de belleza en Corea del Sur. Las mujeres que practican el 4B han optado por vivir en hogares cooperativos y participar en actividades exclusivas para mujeres.

En primer lugar, el componente “Body” se centra en desafiar los estándares de belleza poco realistas y la cosificación del cuerpo femenino en los medios y la sociedad en general. Las activistas buscan combatir la objetivación sexual y el acoso callejero, promoviendo la idea de que el cuerpo de una mujer no es un objeto para el consumo masculino, sino una expresión de su identidad y autonomía.

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El segundo componente, “Birth”, se ocupa de cuestiones relacionadas con la maternidad y la reproducción. Esto incluye la lucha por el acceso a una atención médica de calidad durante el embarazo y el parto, así como la resistencia contra la presión social sobre las mujeres para que se casen y tengan hijos. Además, el movimiento aboga por políticas que respalden a las madres trabajadoras y promuevan una visión más inclusiva de la maternidad y la paternidad.

El tercer componente, “Bed”, aborda la autonomía sexual y los derechos reproductivos de las mujeres. Esto incluye la demanda de acceso a la educación sexual integral, así como a servicios de salud reproductiva, que incluyen la anticoncepción y el aborto seguro y legal. Las activistas también buscan desafiar las normas de género que perpetúan la desigualdad en las relaciones íntimas y promover el consentimiento y el respeto mutuo.

Por último, el componente “Bread” se refiere a la independencia económica de las mujeres y la igualdad de oportunidades en el ámbito laboral. A pesar de los avances en la participación femenina en la fuerza laboral, persisten desigualdades salariales y barreras para el progreso profesional. El movimiento 4B aboga por políticas que promuevan la igualdad salarial, la licencia parental equitativa y la eliminación de la discriminación de género en el lugar de trabajo.


El movimiento feminista 4B en Corea del Sur ha implementado diversas estrategias para promover sus objetivos, las cuales incluyen manifestaciones, campañas de concientización, acciones legales y presión política. A través de estas iniciativas, las activistas han logrado generar un diálogo público sobre cuestiones de género y han ejercido presión sobre los líderes políticos y la sociedad en general para abordar las desigualdades sistémicas que afectan a las mujeres.

Este movimiento feminista en Corea del Sur se presenta como una fuerza activa en la lucha por la igualdad de género y los derechos de las mujeres. Al abordar una amplia gama de problemas, desde la violencia de género hasta la equidad salarial, el 4B continúa desafiando las normas patriarcales y trabajando hacia la construcción de una sociedad más justa e inclusiva para todas las personas.

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