Tras un periodo marcado por las adicciones, Tristán, hijo del cantante Yahir, inició una nueva etapa enfocada en el trabajo, la música y la reconstrucción familiar
La trayectoria personal de Tristán, primogénito del cantante Yahir, atraviesa una transformación significativa. Luego de enfrentar una etapa compleja vinculada al consumo de drogas, el joven ha optado por reorganizar su vida con decisiones concretas orientadas a la estabilidad, el trabajo y el bienestar personal.
En meses recientes, Tristán se ha mantenido alejado de los excesos que lo distanciaron de su familia y ha encontrado en actividades cotidianas una forma de sostenerse y mantenerse enfocado. Entre ellas destaca la venta de aguacates, un empleo que le permite generar ingresos, conservar rutinas y evitar escenarios asociados a recaídas.
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Este cambio también ha impactado de manera positiva en su vínculo con Yahir. En declaraciones a medios, el cantante habló del proceso que vive su hijo y del valor que tiene verlo avanzar en su recuperación. “Para mí lo más importante es que esté bien, feliz, que tenga proyección en su vida, que tenga armonía con la familia que tanto lo amamos… Me gusta mucho platicar con él, es un hombre que ha vivido mucho, es muy inteligente, nos encanta tenerlo cerca y amarlo”, expresó.
La reconciliación entre padre e hijo comenzó a consolidarse desde el último tramo de 2023. En octubre de ese año, Yahir confirmó que lograron superar conflictos previos y retomar una comunicación constante, lo que sentó las bases para una relación más cercana.
Además del reencuentro emocional, ambos han coincidido en proyectos compartidos. Yahir reveló que colaboran en una iniciativa relacionada con las carreras de autos, una afición que Tristán desarrolló desde la infancia y que hoy funciona como un espacio de convivencia y apoyo mutuo.
Aunque su principal actividad actual es la venta de aguacates, la música sigue presente en la vida de Tristán. El cantante destacó que su hijo mantiene el enfoque en la creación musical y cuenta con su respaldo. “Me encantó verlo y saber que le va a echar todos los kilos a la producción musical, que es en lo que está ahorita súper enfocado. Así que le deseo todo lo mejor, y cuenta conmigo”, afirmó.
Sobre esta etapa, Yahir explicó cómo su hijo combina trabajo y creatividad. “Se dedica a vender aguacates ahorita, pero en el carro donde anda trae el micro y la compu, y va componiendo de un trayecto a otro, haciendo rolas y me manda ideas”, relató.
El proceso no ha sido improvisado. El cantante señaló que, como familia, han recurrido a terapia psicológica para enfrentar las dificultades. “Hemos recibido mucha terapia, ayuda y herramientas, pero ahora quien está saliendo por él mismo es él”, aseguró.
Hoy, Tristán busca consolidar un futuro con metas claras, lejos de las adicciones y con una vida más equilibrada, marcada por la reconciliación familiar, el trabajo constante y la música.
