
Un ciudadano mexicano fue arrestado en el AICM al intentar abordar un vuelo a Japón con 299 reptiles protegidos ocultos en maletas documentadas
Un operativo conjunto en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) llevó a la captura de un ciudadano mexicano señalado como traficante internacional de especies, quien pretendía viajar a Japón con 299 reptiles ocultos en dos maletas. El arresto fue resultado de una investigación de largo alcance liderada por autoridades ambientales y de seguridad federal.
El detenido, identificado como Gustavo “N”, fue sorprendido cuando se disponía a abordar un vuelo internacional. En su equipaje documentado se encontraron escorpiones arborícolas, falsos camaleones, serpientes tigre, lagartos Alicante, lagartijas escamosas, falsos coralillos y basiliscos, todos catalogados como ejemplares de vida silvestre cuya posesión y traslado está restringida por normativas nacionales e internacionales.
El aseguramiento fue ejecutado con la participación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), la Secretaría de Marina (Semar), la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y la Fiscalía General de la República (FGR), a través de la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO).
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La FGR ya integró la carpeta de investigación correspondiente y reconoció la participación de Profepa como parte acusadora. El caso se sustenta en los artículos 420, fracciones IV y V del Código Penal Federal, los cuales sancionan actividades como captura, posesión, transporte, importación o exportación de especies silvestres con penas que van de uno a nueve años de prisión, además de multas económicas que pueden superar los tres mil días de salario mínimo.
“La persona detenida es un conocido traficante internacional; se trata de un ciudadano mexicano que tiene múltiples antecedentes, destacando su detención en las Islas Galápagos, Ecuador, por el intento de exportación ilegal de iguanas marinas y terrestres, y en Nueva Zelanda, por el intento de exportación ilegal de diferentes especies de geckos endémicos y en peligro de extinción”, comunicó Profepa.
Respecto al estado de los animales asegurados, se confirmó que varios se encontraban deshidratados y en condiciones críticas por hacinamiento. Las especies pertenecen a los géneros Abronia y Phrynosoma, ambos incluidos en el Apéndice II de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES).
Los reptiles fueron trasladados a un centro especializado bajo la coordinación de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), donde reciben atención veterinaria y resguardo temporal, en espera de su recuperación y evaluación para futura reubicación.