Estados Unidos sancionó a 13 exmilitares salvadoreños por su vinculación con el asesinato, en noviembre de 1989, de seis sacerdotes jesuitas que sacudió El Salvador entre 1980 y 1992.
El secretario de Estado, Mike Pompeo, detalló que la sanción “se debe a su participación en violaciones graves de los derechos humanos en el Salvador relacionadas con la planificación y ejecución de los asesinatos extrajudiciales”.
Los exmilitares que tienen prohibido el ingreso a Estados Unidos son:
Juan Rafael Bustillo
Juan Orlando Zepeda
Inocente Orlando Montano Morales
Francisco Elena Fuentes
Guillermo Alfredo Benavides Moreno
Yusshy René Mendoza Vallecillos
José Ricardo Espinoza Guerra.
Gonzalo Guevara Cerritos
Carlos Camilo Hernández Barahona
Óscar Mariano Amaya Grimaldi
Antonio Ramiro Avalos Vargas
Ángel Pérez Vásquez Vásquez
José Alberto Sierra Ascencio
Así como todos los miembros de sus familias inmediatas.
“Estados Unidos condena todas las violaciones de los derechos humanos que tuvieron lugar desde ambos lados de la brutal guerra civil en El Salvador, incluidos los cometidos por los partidos gubernamentales y no gubernamentales”, puntualizó Pompeo en la nota.
Además, dijo que el Gobierno de Donald Trump apoya la rendición de cuentas, la reconciliación y los esfuerzos de paz en curso en El Salvador.
En esta misma línea, 77 por ciento apoya que las autoridades gobiernen con “mano dura” y 65 por ciento que es necesario “no tomar en cuenta a las personas que causan problemas” para que el “país mejore”.
Por otra parte, 54 por ciento de la población opinó que el país está “igual” o “peor” que durante la guerra civil, mientras que 46 por ciento que está “mejor”.
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