
Autoridades egipcias impidieron el avance de una movilización pacífica que buscaba llevar ayuda humanitaria a la Franja de Gaza; varios participantes fueron expulsados del país.
Una marcha internacional que tenía como objetivo entregar ayuda humanitaria a Gaza fue detenida por el gobierno de Egipto, que también procedió a deportar a diversos activistas involucrados en la iniciativa. La movilización, organizada por la coalición “Global Gaza March”, reunió a cientos de personas provenientes de distintos países, quienes buscaban cruzar por el paso de Rafah para solidarizarse con la población palestina.
Los organizadores informaron que varios de los participantes fueron retenidos al llegar a El Cairo y posteriormente enviados de regreso a sus lugares de origen sin justificación detallada por parte de las autoridades egipcias. Entre los expulsados se encuentran defensores de derechos humanos, académicos y miembros de organizaciones no gubernamentales.
La iniciativa pretendía entregar insumos médicos y productos de primera necesidad a la población de Gaza, afectada por el conflicto armado y las restricciones fronterizas. Sin embargo, Egipto argumentó razones de seguridad para evitar el cruce de los activistas hacia la zona en conflicto, sin ofrecer mayores precisiones sobre los riesgos implicados.
Este operativo generó críticas de diversas agrupaciones internacionales, que acusaron al gobierno egipcio de bloquear esfuerzos humanitarios legítimos. Además, denunciaron que la respuesta oficial vulnera derechos fundamentales como la libre expresión, el tránsito y la solidaridad internacional en contextos de crisis.
A pesar del revés, los organizadores de la marcha aseguraron que continuarán sus esfuerzos desde otras regiones y reiteraron su compromiso de visibilizar la situación en Gaza. También pidieron a la comunidad internacional ejercer presión diplomática para permitir el acceso de ayuda humanitaria sin restricciones.