El ejercito iraquí consideró que la mejor opción para conseguir el orden fue imponer un toque de queda hasta nuevo aviso.
Este lunes, miles de estudiantes se unieron a las protestas antigubernamentales que sacuden Irak, desafiando las advertencias de las autoridades.
Adel Abdelmahdi, primer ministro de Irak, respondió intensificando la presencia de militar en las calles y decretando un toque de queda en la capital, Bagdad.
El toque de queda está previsto de medianoche a seis de la mañana “hasta nuevo aviso”.
Dicha medida se debe a que en los últimos cuatro días de manifestaciones las autoridades no han logrado acallar el movimiento.
El gobierno iraquí lanzó una controvertida respuesta policial que dejado casi 80 muertos desde el pasado viernes.
“El pueblo quiere la caída del régimen”, son los cánticos que corean varios centenares de estudiantes por las calles del barrio de Al Mansur.
“El Gobierno nos tiene miedo”
Zahra, una ingeniera en paro de 25 años cuando se le pregunta por la presencia de los soldados en la calle.
Aún es complicado calcular cuántos manifestantes hay en la plaza debido a que aumentan a lo largo del día, aunque la mayoría se va a casa a dormir.
Por otro lado, madres y abuelas se ocupa de llevarles agua y comida, sin arredrarse ante las continuas detonaciones.
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AVM
