Como respuesta a los ataques del 9 de enero, el gobierno de Ecuador puso en marcha el Plan Fénix; hasta ahora se han detenido a 859 personas
De acuerdo con el balance presentado por la presidencia de Ecuador, un total de 859 personas han sido detenidas en el país en el marco de la ofensiva contra el narcotráfico.
Otros cinco presuntos delincuentes fueron abatidos y las fuerzas de seguridad desarticularon nueve grupos calificados como terroristas.
Según el corte del 9 al 12 de enero, como parte de la ofensiva conocida como Plan Fénix, la policía ha realizado siete mil 814 operativos.
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Asimismo, 246 armas de fuego fueron decomisadas, 307 vehículos recuperados y cuatro mil 98 municiones incautadas.
Ecuador se encuentra en estado de excepción desde el lunes pasado, luego de que un día antes se escapó el narcotraficante Adolfo Macías, Fito.
En este mismo contexto, el martes pasado, grupos criminales tomaron el canal de televisión TC, sometieron a los periodistas y los obligaron a transmitir en vivo sus demandas.
En otros sitios del país se registraron atentados, en una ola de ataques que dejó 16 muertos, entre ellos dos policías.
Según el último conteo, 23 agentes penitenciaros y otros cinco administrativos fueron liberados.
Ayer, Noboa, planteó al Congreso un alza de 12% a 15% del Impuesto al Valor Agregado (IVA) para financiar el “conflicto armado interno”.
Noboa, en el poder desde noviembre, presentó ante la Asamblea Nacional el proyecto de ley tributaria en calidad de urgente.
La presente Ley tiene por objeto enfrentar el conflicto armado interno, la crisis social y económica por la cual atraviesa el Ecuador y que ha agravado la difícil situación fiscal”, señala el proyecto.
Al menos 22 bandas criminales han sometido al país a un estado de violencia extrema, según la declaratoria de conflicto interno de Noboa.
Debido a la violencia del narcotráfico, Ecuador registró el récord de 46 homicidios por cada 100 mil habitantes en 2023, un incremento de 800% desde 2018.
Las organizaciones, con nexos con carteles de México y Colombia, se disputan el poder con matanzas en las penitenciarías que dejan más de 460 reclusos muertos desde 2021.
Con información de AFP
