Van por los Chapitos, según anuncia el Departamento de Justicia de Estados Unidos, un día después de la visita de Marcelo Ebrard a la Casa Blanca.
El Departamento de Justicia va por los tres hijos de Joaquín Guzmán, y 25 miembros del cartel de Sinaloa, para evitar el tráfico de fentanilo.
Los cargos de tráfico de fentanilo, armas y lavado de dinero se dieron a conocer hoy en el Distrito Sur de Nueva York contra 28 acusados, incluidos tres de los Chapitos: Iván Archivaldo, Alfredo y Ovidio Guzmán. así como principales lugartenientes y líderes de plaza del Cártel de Sinaloa; presuntos fabricantes y distribuidores del fentanilo.
Según documentos judiciales de Estados Unidos, los ‘Chapitos’ y sus cómplices supuestamente controlaban operaciones extensas, multifacéticas e internacionales que cubrían el comercio de fentanilo. A través de estos esfuerzos, el cártel presuntamernte obtuvo cientos de millones de dólares en ganancias al inundar los Estados Unidos con fentanilo.
El cártel de Sinaloa es uno de los carteles de la droga más poderosos del mundo y es en gran parte responsable de la fabricación e importación de fentanilo para su distribución en los Estados Unidos.
La acción impuesta por el Departamento de Justicia de Estados Unidos incuye sanciones contra las redes de tráfico de fentanilo entre China y México, desde las empresas químicas en China que generan precursores de fentanilo, hasta los laboratorios ilícitos que producen la droga, las redes y lavadores de dinero y asesinos que facilitan su distribución.
El Departamento de Estado de Estados Unidos ofrece recompensas de hasta 10 millones de dólares por información que conduzca al arresto y/o condena de Iván Archivaldo, Alfredo Ovidio Guzmán López, y hasta 5 millones de dólares por información que condujo al arresto y/o condena de Joaquín Guzmán López.