
En un video que rápidamente se volvió viral en X, se observa a una clienta —quien grabó la situación con su propio teléfono— exigiéndole a un repartidor que le entregara su pedido directamente en la mano.
En México, la alta presencia de repartidores ha generado escenas curiosas y, en ocasiones, absurdas que, cuando quedan grabadas, suelen difundirse masivamente en redes, como ocurrió recientemente con el trabajador que entregó un pedido bajo una tormenta.
En esta ocasión, la polémica surgió cuando una mujer le pidió al repartidor que bajara de su motocicleta para entregarle su comida, a pesar de que él se encontraba a solo un par de pasos de distancia. La reacción de los usuarios en línea fue inmediata, criticando a la mujer porque “solo tenía que extender la mano”.
En el video se escucha a la clienta reclamar: “¿Podría hacer bien su trabajo? ¿Me puede entregar mi comida?”, mientras el repartidor, aún sobre la moto, le responde: “Le estoy pidiendo el código y no me lo quiere dar”.
La mujer empieza diciendo que ya le han robado pedidos antes, insinuando que esa era su preocupación, pero el repartidor la interrumpe: “¿Yo se la estoy robando?”.
Ella lo niega, pero continúa presionando: “Le estoy diciendo que me entregue mi comida. ¿Se puede bajar de la moto y darme mi pedido? Es su trabajo; soy la cliente y le estoy pagando para que lo haga bien”.
Cansado de la discusión, el repartidor responde: “Se la estoy entregando, son dos pasos”.
La clienta insiste: “¿No puede bajarse de la moto?”. Él le pregunta de nuevo: “¿Y por qué no me da el código?”.
Alterada, ella eleva la voz: “Sí tengo el código. ¿Me está diciendo ratera? Bájese y entrégueme mi comida”.
Te podría interesar: Llevan un trompo de tacos al pastor al cine
El trabajador le explica que están prácticamente a un paso de distancia, pero la mujer continúa acusándolo de querer quedarse con su comida. “¿Cómo se la voy a robar si se la estoy entregando y usted no la quiere tomar?”, cuestiona él.
Finalmente, el repartidor extiende el paquete acercándose aún más: “Aquí está”.
Pero la mujer insiste con el mismo reclamo: “¿Se puede bajar de la moto y entregármela? Es su trabajo de Uber. ¿Yo manejo la moto? ¿Cómo sé que no se va a ir y me va a robar mi comida?”.
A pesar de la presión, el repartidor conserva la calma: “Le estoy entregando el pedido”.
Ella termina la discusión gritándole: “¿Sabe qué? Ya no quiero seguir alegando, lárguese, si lo que quiere es hacer berrinche”.
Él responde: “No es ni un paso, aquí está su pedido”, y termina aventándole la bolsa.
La grabación, que se difundió ampliamente en X y otras plataformas, desató numerosas reacciones en defensa del repartidor, mientras que la mujer fue señalada como altanera y prepotente.







