El tiempo será el encargado de darnos respuestas, sin embargo no es la primera vez que un avión comercial es alcanzado por la política y el conflicto
Como si no faltaran pretextos para escalar las tensiones entre Estados Unidos e Irán, ayer el Primer Ministro canadiense, Justin Trudeau afirmó tener información de inteligencia que le daba datos suficientes para saber que el vuelo 752 de Ukraine Internacional Airlines había sido derribado por un misil iraní lanzado desde tierra.
Por su parte el portavoz del gobierno iraní, Ali Rabiei negó a través de un comunicado que esto sea cierto. Argumentando que estos informes son una guerra psicológica contra su país.
E instó a las naciones cuyos ciudadanos viajaban a bordo y a la propia Boeing a enviar representantes a Irán y unirse al proceso de investigación. Y a Canadá le pidió los datos que le hacen pensar que el avión no cayó por una falla mecánica.
¿Fue un error? ¿Lo derribaron a propósito? ¿Se trata de una campaña de desprestigio? El tiempo será el encargado de darnos respuestas, sin embargo no es la primera vez que un avión comercial es alcanzado por la política y el conflicto.
Al menos desde los 70, los aviones comerciales no han estado exentos de quedar entre fuego cruzado. El Boeing 727 de Libyan Arab Airline fue derribado en el 73 por aviones de combate israelí sobre el desierto del Sinaí al volar de Trípoli a El Cairo.
A la lista se suman el Boeing 747 de Korean Air derribado por aviones soviéticos en 1983. Un Airbus A-300 de Iran Air derribado en el Golfo Pérsico por una fragata estadounidense en 1988.
El Tupolev 154 que explotó sobre el Mar Negro por un disparo accidental de un misil ucraniano. Y por supuesto el MH17 de Malaysia Airlines derribado en 2014 por un misil debido al conflicto entre Kiev y separatistas pro rusos que buscan el control del este de Ucrania.
Las probabilidades de estar en un avión que pueda ser confundido y derribado son muy pocas, sin embargo esto no ha sido pretexto para que algunos países inviertan en tecnología que dote de alarmas o sistemas que puedan proteger a aviones de carga o pasajeros ante un posible ataque.
Dispositivos instalados en el fuselaje, tecnología antimisiles con avanzados sistemas láser, cámaras de reconocimiento térmico o espejos dinámicos, son algunos de los aparatos que portan aviones que cubren rutas peligrosas.
Por lo pronto, algunos países ya han anunciado la cancelación de vuelos o la reestructuración de rutas por territorios en conflicto.
Y sólo nos resta esperar que con el uso de las nuevas tecnologías y que ahora prácticamente todo puede quedar registrado en videos de aficionados, sirvan para reducir estas confusiones que sólo escalan las ya de por si frágil relaciones entre muchos países.
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