Tras más de dos semanas desaparecida, el cuerpo de la joven fue hallado en un sistema de drenaje; familiares denuncian negligencia de las autoridades.
La familia de Vivian Karely Aispuro, joven de 26 años reportada como desaparecida desde el 22 de marzo, exige justicia tras el hallazgo de su cuerpo sin vida y con signos de violencia en el fraccionamiento Villa Fontana, al norte de Culiacán. El descubrimiento ocurrió el pasado 7 de abril, más de dos semanas después de su desaparición.
Durante el período en que Vivian estuvo desaparecida, sus familiares denuncian que las autoridades locales mostraron desinterés en la búsqueda. Su hermana, Alejandra, expresó que la policía no realizó esfuerzos significativos para localizarla, lo que obligó a la familia a emprender la búsqueda por cuenta propia. “Mi hermana ni siquiera pudo tener un funeral digno”, lamentó Alejandra, refiriéndose al avanzado estado de descomposición en que fue encontrado el cuerpo de Vivian.
Colectivos feministas y diputadas locales se han unido a la exigencia de justicia, criticando la falta de acción de las autoridades y señalando que solo la familia y las colectivas estuvieron activamente buscando a Vivian. El colectivo Amapas del Norte emitió un pronunciamiento en el que aseguró que encontrarla en esas condiciones no puede ser minimizado bajo la figura de “homicidio”.
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La familia de Vivian Karely hace un llamado a las autoridades para que se realice una investigación exhaustiva que conduzca a la detención y enjuiciamiento de los responsables de su muerte. Además, solicitan que se implementen medidas efectivas para prevenir futuros casos de violencia de género en la región.
Este caso ha generado indignación en la comunidad de Culiacán y ha reavivado el debate sobre la respuesta de las autoridades ante las desapariciones y feminicidios en México. Organizaciones de derechos humanos insisten en la necesidad de políticas públicas más efectivas para proteger a las mujeres y garantizar justicia para las víctimas y sus familias.
