
Esteban Valdés afirma que su padre abandonó el programa por desacuerdos con la entonces nueva directora, en referencia a Meza.
El reciente estreno de la bioserie Chespirito: Sin querer queriendo ha reavivado debates en torno al icónico elenco de El Chavo del 8. Entre los temas que resurgieron está la polémica salida de Ramón Valdés, mejor conocido como Don Ramón, cuya razón —según su hijo— estaría relacionada con Florinda Meza.
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En entrevista para el programa Ventaneando, Esteban Valdés aclaró que su padre no dejó la producción por dinero ni por otras ofertas de trabajo. Según él, el motivo principal fue un ambiente laboral cada vez más tenso, especialmente tras el nombramiento de una nueva directora del programa.
“Mi papá no se fue por cuestiones económicas ni por una mejor oferta. Se fue porque ya no era feliz con la dirección que había tomado el programa”, afirmó.
Aunque evitó mencionar nombres directamente, los conductores del programa señalaron que la nueva directora era Florinda Meza, a lo que Esteban asintió, confirmando las sospechas. Incluso, durante el corte comercial, uno de los presentadores se refirió a Meza como “la Yoko Ono” del elenco, una comparación que Esteban no refutó y calificó como una percepción popular.
Tensión tras bambalinas
Esteban comentó que, tras la salida de su padre, varios compañeros también decidieron dejar el programa, lo que reforzaría la idea de un ambiente complicado al interior del equipo. Aunque reconoció el talento de Meza, sugirió que su papel en la producción fue determinante en la fractura del grupo.
Carrera después de Televisa
Luego de su retiro de El Chavo del 8 en 1979, Ramón Valdés continuó su carrera artística junto a Carlos Villagrán, “Quico”, quien también abandonó el programa por diferencias con el creador Roberto Gómez Bolaños. Juntos protagonizaron el programa ¡Ah, qué Kiko! en Venezuela, donde revivieron su estilo cómico con personajes similares a los originales.
Además de su trabajo en televisión, ambos actores realizaron giras y presentaciones en vivo por distintos países de Latinoamérica, como Perú, Colombia y Venezuela, donde el cariño del público se mantuvo intacto.
Durante los años 80, Valdés enfrentó problemas de salud y falleció en 1988 a causa de cáncer de estómago. Sin embargo, su legado sigue vigente, especialmente por su entrañable personaje de Don Ramón, considerado uno de los más queridos de la televisión en español.
Con información de Excelsior