La industria entró en una crisis luego de que el gobierno suspendiera su producción por considerarlo un producto no esencial
La industria cervecera mexicana “está lista” para reactivar su producción a partir del 1 de junio tras casi un mes y medio detenida por la emergencia sanitaria de COVID-19, afirmó la Cámara de la Cerveza.
La parálisis de la producción cervecera causa polémica desde principios de abril, cuando Heineken y Grupo Modelo detuvieron sus plantas tras la emergencia sanitaria que decretó el 30 de marzo el Gobierno mexicano, que suspendió industrias no esenciales como la de bebidas alcohólicas.
Aunque dijo “entender los dilemas y la complejidad” de las decisiones, Marco Mascarua, presidente de Cerveceros de México, cuestionó que su industria no se considere un sector esencial, incluso en el plan hacia “la nueva normalidad” que el Gobierno presentó esta semana e iniciará el 1 de junio.
La empresa cervecera genera 650 mil empleos directos e indirectos, con 5 mil agricultores que siembran 323 mil hectáreas de cebada para la producción.
También lamentó el posible cierre de restaurantes, bares y pequeños negocios, donde la venta de cerveza representa 40 % de sus ingresos, según la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC).
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AFG
