
Israel exige a Hamás aceptar la tregua propuesta por EE.UU. o enfrentará la aniquilación, mientras Trump asegura que un acuerdo está próximo
Israel advirtió a Hamás que debe aceptar la propuesta de alto el fuego presentada por Estados Unidos o sufrirá consecuencias graves, mientras Donald Trump asegura que un acuerdo está próximo.
El conflicto en la Franja de Gaza continúa con tensión máxima, ya que Israel presiona para que Hamás acepte una tregua mediada por Estados Unidos, que incluye la liberación de los rehenes retenidos desde octubre de 2023. El primer ministro israelí lanzó un ultimátum: aceptar el acuerdo o ser “aniquilados”. Por su parte, el presidente estadounidense Donald Trump señaló que un alto el fuego se encuentra “muy cerca”, anticipando avances en las negociaciones.
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Las hostilidades se reanudaron en marzo después de un breve cese de fuego de dos meses. Desde entonces, Israel ha intensificado sus operaciones militares con el objetivo de recuperar el control de Gaza, debilitar a Hamás y rescatar a los últimos rehenes. El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, aseguró que las fuerzas armadas continúan su ofensiva con plena intensidad mientras desplazan a civiles para minimizar daños.
“Los asesinos de Hamás deben elegir: aceptar los términos del ‘acuerdo Witkoff’ para la liberación de los rehenes, o ser aniquilados”, afirmó Katz, haciendo referencia a la propuesta presentada por el enviado especial de Estados Unidos, Steve Witkoff.
Mientras tanto, la crisis humanitaria en Gaza permanece crítica. La ONU advirtió que la población enfrenta un riesgo extremo de hambruna y que la entrada de ayuda humanitaria resulta insuficiente tras semanas de bloqueo. Jens Laerke, portavoz de la oficina de coordinación de asuntos humanitarios de la ONU, calificó a Gaza como “el lugar con más hambre del mundo” y alertó que el 100% de sus habitantes están en peligro.
La situación se agrava con incidentes como el saqueo de suministros médicos destinados a niños desnutridos, denunciado por la ONU y atribuido a grupos armados en el territorio palestino.
Por otro lado, Israel ha acelerado la construcción de asentamientos en Cisjordania, anunciando la creación de 22 nuevas colonias esta semana. Este paso fue criticado internacionalmente, pues dificulta la posibilidad de un Estado palestino y contradice el derecho internacional. Naciones Unidas y Reino Unido condenaron la expansión, calificándola como un “obstáculo deliberado” y un paso en la “dirección equivocada”.
El ministro Katz defendió la medida afirmando que busca consolidar un “Estado judío israelí” en la región, lo que ha generado tensiones diplomáticas. En respuesta, el presidente francés Emmanuel Macron reafirmó la importancia de reconocer un Estado palestino como un imperativo político y moral, lo que Israel calificó como una “cruzada contra el Estado judío”.
En cuanto al proceso de negociación, la Casa Blanca informó que Israel ha dado su visto bueno a la propuesta estadounidense, aunque el gobierno israelí aún no ha emitido confirmación oficial. Hamás, por su parte, se mantiene en consulta sobre el acuerdo sin rechazarlo ni aceptarlo plenamente.
La violencia continúa en Gaza. Solo el viernes, ataques israelíes causaron al menos 45 muertes, entre ellas siete personas en un bombardeo a una vivienda familiar en Jabaliya, al norte del territorio. Desde el estallido del conflicto, el 7 de octubre, han muerto 1,218 personas en Israel, la mayoría civiles, y 57 rehenes permanecen en manos de Hamás, aunque al menos 34 han fallecido según informes israelíes.
En la Franja de Gaza, más de 54,321 palestinos han perdido la vida durante la campaña militar israelí de represalia, de acuerdo con el Ministerio de Salud controlado por Hamás, cifra respaldada por la ONU.