Jonathan Lewis salió en defensa de un amigo después de que un grupo de 15 adolescentes le arrebatara una de sus pertenencias y la arrojara a la basura.
Lo anterior fue percibido como una afrenta por los estudiantes, todos pertenecientes a Rancho High School. El joven de 17 años recibió una serie de golpes que resultaron en su hospitalización. Después de ocho días conectado a un respirador artificial, murió.
El violento ataque ocurrió el 1 de noviembre pasado. Lewis intentó intervenir en defensa de su amigo, pero en lugar de encontrar una solución pacífica, fue recibido con golpes. “La violencia dirigida hacia Lewis nos ha impactado profundamente”, expresó un profesor de la escuela y actual miembro de la Asamblea estatal representando el Distrito 28, Reuben D’Silva. En una entrevista exclusiva con The Nevadan News, subrayó: “Este fue un acto de brutalidad sin precedentes en Rancho High School”.
Las versiones sobre el motivo del ataque son diversas. Mientras algunos sugieren que se originó por la posesión de nicotina, otros indican que la disputa estaba relacionada con unos audífonos. Más allá de los motivos, persiste la indignación por la manera en que 15 jóvenes respondieron a la confrontación.
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El padre del joven expresó su decepción por la conducta de los compañeros de escuela de su hijo. “La violencia solo engendra más violencia y estos niños ni siquiera saben lo que están haciendo la mitad del tiempo”, lamentó.
La unidad de homicidios del Departamento de Policía Metropolitana de Las Vegas (LVMPD) ha iniciado una investigación sobre el asesinato de Jonathan Lewis. Un video compartido en las redes sociales corrobora que Lewis fue agredido hasta que sus atacantes se cansaron.
