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La trata de personas en México, un delito sin cifras claras en pleno 2019

En el marco del Día Internacional contra la Trata de Personas, la CNDH alertó que no ha sido posible concretar una política pública integral para erradicarla

La trata de personas se encuentra tipificada en México en diversos códigos penales y leyes especiales estatales, así como en la Ley para Prevenir y Sancionar la Trata de Personas de 2007), tanto para su cometido a nivel nacional como internacional.

 “[comete el delito de trata de personas quien promueva, solicite, ofrezca, facilite, consiga, traslade, entregue o reciba, para sí o para un tercero, a una persona, por medio de la violencia física o moral, engaño o el abuso de poder para someterla a explotación sexual, trabajos o servicios forzados, esclavitud o prácticas análogas a la esclavitud, servidumbre, o a la extirpación de un órgano, tejido o sus componentes”, señala en su artículo 5.

Sin embargo, la realidad dista todavía de lo que se dice en el papel, dado que son limitados los avances en materia de prevención de este problema, como poder entender los complejos mecanismos con los que operan las redes dedicadas a esta actividad.

Tan solo el Reporte sobre Trata de Personas 2019 de la Embajada de Estados Unidos en nuestro país, comienza de forma fulminante diciendo que “el gobierno de México no cumple con los estándares mínimos para la eliminación de la trata de persona, pero está realizando esfuerzos para lograrlo”.

Y es que, tomando en cuenta que la trata de personas es un crimen, las organizaciones dedicadas a esto operan desde la clandestinidad, por lo que no contamos con una cifra precisa sobre el número de personas afectadas, tanto de parte de las autoridades como de la academia. 

Con ganancias millonarias, nuestro país está catalogado como fuente, tránsito y destino, y los grupos considerados más vulnerables a la trata en México incluyen mujeres, niños, personas indígenas, personas con discapacidades mentales y físicas, inmigrantes y personas LGBTI.

Los tratantes reclutan y explotan a mujeres mexicanas y niños, y en menor medida los hombres y las personas transgénero, en la trata sexual en México y los Estados Unidos a través de falsas promesas de empleo, relaciones románticas o extorsión.

Terminando explotandolos en trabajos forzosos en la agricultura, servidumbre doméstica, cuidado de niños, manufactura, minería, procesamiento de alimentos, construcción, turismo, mendicidad y venta ambulante en México y los Estados Unidos.

En el mismo informe de la embajada estadounidense, señalan que la corrupción y varios casos de complicidad entre algunos funcionarios públicos inhibieron las acciones de aplicación de la ley contra este delito complejo y multicausal.

Teniendo entre las recomendaciones para México el hecho de aumentar los esfuerzos para investigar y procesar los delitos de trata de personas tanto a nivel federal como estatal y sentenciar a los tratantes condenados a penas de prisión significativas.

En este sentido, actualmente la lucha por erradicar el comercio de seres humanos es un objetivo a nivel global y los enfoques utilizados por los Estados se centran cada vez más en las víctimas y la prevención, ante los limitados resultados que presentan las políticas criminales dirigidas exclusivamente a perseguir a los tratantes.

Para esto, el Diagnóstico sobre la Situación de la Trata de Personas en México 2019 de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) señala que el país ratificó el Protocolo de las Naciones Unidas para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas, especialmente Mujeres y Niños en 2003, obligándose con la comunidad internacional a realizar las reformas legislativas necesarias e implementar una política pública integral que, además de la prevención y la sanción, incluyera la atención a víctimas.

Y que en los últimos 15 años se han desarrollado una serie de herramientas normativas e institucionales que muestran la voluntad del gobierno mexicano para combatir este delito que se traduce en una serie de violaciones a los derechos humanos de las personas que son víctimas, y en un deterioro para las comunidades que lo enfrentan, siendo las más afectadas por ubicación geográfica la Ciudad de México, Chihuahua y el Estado de México, que concentran cerca de la mitad de casos de trata de personas a nivel nacional.

Sin embargo, el reto que ha implicado la institucionalización de las políticas públicas y la coordinación interinstitucional para los tres órdenes de gobierno han impedido que se materialicen resultados concretos que puedan traducirse en un combate frontal y efectivo.

Finalmente, en el marco del Día Internacional contra la Explotación Sexual y el Tráfico de Mujeres, Niñas y Niños, la CNDH alertó que pese a contar con un marco legal e instrumentos internacionales para combatir esta actividad, no ha sido posible concretar una política pública integral para erradicarla.

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