Se informó que la reducción de tests mostrará un menor número de casos que los reflejados en la realidad
Con la finalidad de reducir el número de casos confirmados, las autoridades de Los Angeles y Nueva York han dado la instrucción de detener los test a posibles contagiados.
Los ciudades informaron a sus respectivos personales médicos que, salvo que sea un caso excepcional, se debe realizar la prueba.
Por un lado, la Universidad Johns Hopkins de Los Ángeles informó que se le dará prioridad médica a aquellos pacientes con síntomas claros, trabajadores de la salud y personas de edad avanzada, las más vulnerables ante la pandemia:
“No se harán tests a menos que exista la sospecha de que el diagnóstico resultante supondrá un cambio en la gestión del caso del paciente. Esto refleja un cambio de estrategia, que pasa de la contención de casos a la reducción de la transmisión y del índice de mortalidad”
La ciudad de Nueva York, el foco de la epidemia en Estados Unidos dijo en una entrevista con CNN que también reducirán el número de test, pues estos “cobrarán una importancia mayor una vez que la pandemia haya alcanzado su punto álgido”.
Por su parte, el doctor Sanjay Gupta, especialista médico de la cadena de noticias, expresó que la suspensión de estos tests tendrá como consecuencia un número confirmado de casos mucho menor que en la realidad, dado el tamaño de la población de ambas ciudades.
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CAB
