
Marianne deberá cumplir con terapias psicológicas y medidas supervisadas para mantener su libertad asistida, tras un acuerdo por el caso de lesiones dolosas
Tras llegar a un acuerdo con la víctima, la influencer Marianne “N” deberá someterse a terapias psicológicas individuales y familiares, así como participar en actividades grupales como condición para mantener la libertad asistida que le fue otorgada luego de ser sentenciada por lesiones dolosas. Estas disposiciones forman parte de las medidas alternativas definidas por un Tribunal Especializado en Justicia para Adolescentes, y serán supervisadas de manera periódica.
Autoridades judiciales informaron que el cumplimiento de estas medidas será evaluado cada trimestre por un juez de ejecución, quien determinará si Marianne, de 17 años, continúa bajo este esquema o si se modifican las condiciones establecidas. La influencer recuperó su libertad tras aceptar su responsabilidad por las agresiones cometidas el 4 de febrero en un departamento de la alcaldía Álvaro Obregón, donde resultó lesionada Valentina “N”.
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Como parte del acuerdo alcanzado, Marianne recibió una sentencia de dos años de internamiento en un centro especializado para adolescentes, pena que comenzó a cumplir desde el momento de su detención. Sin embargo, se le concedió la libertad asistida tras acordar medidas alternativas que permiten su reintegración bajo supervisión, en lugar de permanecer internada.
El abogado de Valentina, Ayrton Marín, explicó que “no se trata de prisión domiciliaria, sino de un esquema legal de libertad asistida, contemplado por la legislación en justicia para menores”. Destacó que, aunque Marianne fue declarada culpable de las lesiones, el caso se resolvió mediante mesas de diálogo que permitieron al Ministerio Público solicitar un procedimiento abreviado.
Esta vía fue considerada la más adecuada para proteger a Valentina de una revictimización durante un proceso ordinario, donde la pena máxima por lesiones dolosas que ponen en riesgo la vida no habría superado los cinco años, y el internamiento preventivo no podía extenderse más de cinco meses.
De esta forma, Marianne podrá continuar con sus actividades bajo una estricta supervisión, con la condición de cumplir con las terapias psicológicas y familiares, así como con otras actividades determinadas, lo que será clave para que la influencer pueda mantener la libertad asistida y continuar con su proceso de reinserción, siempre bajo la vigilancia de las autoridades competentes.