Sara Milliken, Miss Alabama, fue objeto de una considerable cantidad de acoso cibernético después de ganar el certamen de belleza.
La joven de 23 años, que es de talla grande, respondió que “incluso las palabras escritas en una pantalla pueden dejar una impresión duradera en la gente”. En una entrevista con WKRG-TV, afiliada de CBS, declaró: “Aunque yo no esté en ese punto, esto puede llevar a las personas a hacer cosas muy oscuras”. Milliken señaló que algunos de los abusos que recibió fueron repugnantes.
Admitió que el odio la afectó por unos cinco minutos, pero reveló que no quería enfocarse en lo que publicaban los que la odiaban. En una publicación en redes sociales, instó a la gente a difundir bondad.
Milliken expresó que es una bendición poder vivir su sueño. Ahora competirá en las finales nacionales que se celebrarán en Orlando en noviembre.
Reveló que ganar el concurso National American Miss Alabama fue un sueño que había cultivado durante ocho años. Milliken se mostró sorprendida por su éxito y admitió que su objetivo inicial era llegar al top 10.
Te podría interesar: Michi se roba el show en concierto sinfónico
La victoria de Milliken fue en su tercer intento en el concurso, el cual, según ella, busca fomentar una “autoimagen positiva realzando la belleza natural interior”.
La joven respondió a una convocatoria abierta y compitió durante el fin de semana del Memorial Day, participando en una serie de entrevistas, trabajos voluntarios y presentaciones.
La puntuación en el certamen se basa en “la personalidad, la confianza y la comunicación”, según los organizadores. El sitio web afirma que “los aparatos ortopédicos, los anteojos, los problemas de la piel, las diferentes alturas, pesos y apariencias son parte de la creación del individuo especial y único que eres y que queremos celebrar”.
En su perfil de Pageant Planet, Milliken reveló su deseo de ser la primera NAM Miss Alabama de talla grande. “Planeo romper los techos de cristal del espectáculo para crear un camino para que otras mujeres persigan sus sueños, sin importar su forma o tamaño”, dijo. Milliken admitió que cuando era más joven, competía en concursos de belleza solo por el título y el glamour.
