Los abusos físicos, emocionales y sexuales dentro del hogar hacia las mujeres se ha incrementado hasta un 30 por ciento a consecuencia del encierro
El confinamiento social que se ha dado a causa de la pandemia por Covid-19, se ha convertido en una verdadera prisión con mercenario incluido para muchas mujeres que sufren violencia intrafamiliar, las cuales han incrementado sus pensamientos suicidas durante este periodo de cuarentena.
De acuerdo con el Centro de Atención de la alcaldía Tlalpan, los abusos físicos, emocionales y sexuales dentro del hogar hacia las mujeres se ha incrementado hasta un 30 por ciento en lo que va del periodo de aislamiento por el coronavirus.
Las mujeres, que tienen que permanecer en casa ante el cierre de sus centros de trabajo o lugares de refugio como iglesias y centros de atención psicológica, han sufrido mayores ataques por parte de sus parejas y familias de tendencias violentas.
Norma Gálvez, directora de Equidad de Género en Tlalpan, señaló que las mujeres han sufrido más afectaciones de tipo psicológico al permanecer recluidas más tiempo con sus agresores.
“Hacen referencia a suicidarse, por eso la atención que estamos teniendo más es la psicológica. Sí hay golpes, hay humillaciones, hay un tema bastante fuerte con la amenaza hacia los hijos, que les van a quitar a los hijos o que golpean a los hijos”, apuntó.
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