Este domingo en declaraciones en Chilapa, el sacerdote remarcó que no entraría en polémica
El obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, negó que sea vocero de un grupo criminal, como señaló el coordinador del colectivo Siempre Vivos, José Díaz Navarro.
Díaz Navarro acusó el pasado jueves 31 de marzo en el noticiero Quadratín Noticias que el obispo Rangel es vocero y principal protector de Los Ardillos, grupo delictivo que dijo, mantiene el control en Chilapa.
Este domingo en declaraciones en Chilapa, el sacerdote remarcó que no entraría en polémica, pero subrayó: “Sabemos quién fue el que lo declaró (Díaz Navarro), sabemos a qué se dedicaban sus hermanos”.
En este sentido señaló que en su momento los hermanos de Díaz Navarro apoyaban a otro grupo criminal que ha golpeado a las comunidades de Alcozacán y Rincón de Chautla, municipio de Chilapa.
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Rangel Mendoza aseguró que su trabajo ha sido el de retar a la gente y al gobierno a que se asomen a las zonas que son controladas por “estos señores”, en alusión a los jefes criminales, con el fin de que observen que en estas zonas no hay secuestros, tráfico de drogas ni asesinatos.
“Ellos están dispuestos a ayudar, a cooperar, y pues yo sé que este señor (Díaz Navarro) anda muy resentido, desgraciadamente está apoyado por una protección federal y de ahí se basa, pero ¿Qué bien ha hecho él a Chilapa?, ¿o qué bien hicieron sus hermanos? Aquí no nos van a engañar”, acusó el obispo.
Incluso, dijo que de estos grupos delictivos ha escuchado comentarios que los políticos no mencionan, como es el caso de reconstruir Guerrero y el municipio de Chilapa.
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CAB
