Nora Liz de 23 años tiene cuatro meses de embarazo y se separó de su esposo después de que la golpeó y la hiciera preocuparse por su estado
Hace un mes Nora Liz López Saldívar, de 23 años, dejó a su hija encargada con su madre. Tenía que hablar con su esposo, de quien se había separado en septiembre por los maltratos que recibía, pero su embarazo le preocupaba.
La joven tenía cuatro meses de embarazo y dentro de poco no podría trabajar.
Claudia Ivonne Saldívar Estrada, madre de Nora Liz, narró que la noche del 11 de noviembre su hija le dijo que iría al departamento que había compartido con su esposo en Xalapa, Veracruz, que ahí se verían.
Nos llamaron al día siguiente del kínder de mi nieta, Nora no se había presentado por la niña. Dijo una de las maestras que llamaron a su teléfono celular, que les contestó un varón y les dijo que ese ya no era el número de mi hija”, relató la señora Valdivia.
Por más que se trató de comunicar con su hija, no pudo. El teléfono estaba apagado.
Solicitamos su colaboración para localizar a la C. Nora Liz López Saldivar, cualquier información contactar al número y/o correo que aparecen al margen de este boletín.#Xalapa#Veracruz #Banderilla #Coatepec pic.twitter.com/oWB6tjAois
— Comisión Estatal de Búsqueda Veracruz (@cebver) November 13, 2019
Además de acudir a presentar una denuncia ante la Fiscalía de Veracruz por la desaparición de Nora Liz, la madre fue a buscar a Iván Hernández Espinosa, esposo de su hija, para preguntarle por ella.
Nora Liz tiene 23 años, tiene cuatro meses de embarazo, el refiere (Iván Hernández) que se separaron por infidelidades, pero ella me dijo que se separaron porque rompió cosas, la golpeó y él se llevó una computadora de la casa de mi hija”, explicó Claudia.
Le dijo que se habían visto la noche del 11 de noviembre y que al día siguiente, a las 7:30 horas del martes, se fue y no la volvió a ver.
Hasta el momento, la familia de Nora Liz no tiene más información sobre las investigaciones o algún avance.
No la encuentran y encima el departamento que habitaba su hija, el propietario exigió que lo desocuparan y que pagara el reacondicionamiento del lugar, cuando se trata del último lugar en donde la joven estuvo antes de no dejar rastro.
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