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Organizaban robos en familia a través de WhatsApp #TrasLaPista

Una banda de asaltantes que usaba un grupo de WhatsApp para coordinarse, y así poder asaltar a cuentahabientes, fue ubicada y desmantelada gracias a las denuncias de sus víctimas

Lo que parecía ser un cliente más que mensajeaba en su celular dentro de una sucursal bancaria, en realidad era un delincuente al acecho de una víctima poniéndose de acuerdo con sus cómplices que se encontraban al exterior.

Esta banda de asaltantes que nos presenta nuestro compañero carlos Jiménez en Tras la pista, era conocida como ”Los Quintana Lara” y su modo de operar era permanecer sentado al interior del banco para dar aviso del cuentahabiente que estuviera por salir con una fuerte cantidad de dinero. En algún punto del trayecto, sería sorprendido por otro sujeto que bajaría desde un automóvil para asaltarlo.

Sin embargo, un hombre al que despojaron de 30 mil pesos en efectivo hizo una denuncia al número de emergencia 911, detallando que el delincuente lo había seguido hasta su domicilio.  La querella de este asalto fue atendida por un grupo de agentes de la Policía de la Ciudad de México que forma el área que da seguimiento a los robos que sufren usuarios de sucursales bancarias.

Los elementos analizaron los videos de seguridad del banco y descubrieron que el ladrón que vigiló al hombre asaltado, ya lo habían grabado en otro robo en el que despojaron de 76 mil pesos a su víctima de forma violenta. así, al seguir con el análisis, detectaron al bandido en otros 16 asaltos.

Una vez ubicado, los agentes se dedicaron a estudiar la ruta que utilizaban los delincuentes  y así descubrieron que luego de robar iban a ocultarse a la colonia Doctores, pues todos eran familiares en la zona.

Una vez reunida toda la información, los investigadores comenzaron a detener uno a uno a los delincuentes, descubriendo que los miembros de la familia Quintana Lara tenían un grupo de WhatsApp llamado “La Chamba” en donde coordinaban todos sus crímenes.  Por eso en todo momento se veía a los ladrones mandando mensajes en los bancos.

De esta forma, gracias a las denuncias de las víctimas y un minucioso trabajo de laboratorio,  la policía de la Capital del país pudo ir tras la pista y desintegrar a la llamada banda de los Quintana Lara, que estaba integrada por hermanos tíos primos y demás familiares que operaba en distintas delegaciones y el Estado de México.

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