La pareja mencionó que era verdad que ambas familias compartían ciertas similitudes físicas, pero nunca imaginaron que esto implicara que estuvieran relacionadas de alguna manera.
En Colorado, Estados Unidos, una pareja feliz recientemente descubrió que comparten más que solo amor: comparten ADN. Resulta que son primos y han estado casados durante 11 años. Joseph y Celia Quiñones ya son padres de tres hijos.
Este inusual parentesco salió a la luz después de que ambos se sometieran a pruebas genéticas para unos estudios de salud. Los resultados confirmaron su parentesco, pero en lugar de ocultarlo, lo compartieron de inmediato en sus redes sociales. Decidieron no permitir que esta revelación afectara su relación.
En declaraciones posteriores, la pareja confirmó que es cierto que sus familias compartían similitudes físicas, pero nunca imaginaron que eso implicara algún parentesco entre ellos. Antes de la boda, ninguno de los dos había coincidido en reuniones familiares, funerales o bodas.
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Por lo tanto, cuando decidieron casarse como lo haría cualquier otra pareja enamorada, no tuvieron ninguna sospecha al respecto.
“Después de obtener los resultados, revisé el árbol genealógico del ADN y lo vi aparecer allí”, explicó Celina a la revista estadounidense mencionada anteriormente. Resultó que ella era nada más y nada menos que prima de su esposo.
La prueba genética no proporcionó una claridad definitiva sobre cuán cercanos son, pero una estimación sería que son primos segundos o séptimos.
