Un hombre fue hospitalizado en Boca Grande, Florida, luego de ser mordido por un tiburón limón al intentar posar para una fotografía con el animal durante la celebración de su cumpleaños.
El pescador, identificado como Shawn Meuse, fue atacado en la pierna izquierda por el escualo de casi dos metros tras haber sido sacado del agua por su grupo de amigos.
El incidente ocurrió la noche del sábado, después de que el grupo retirara el anzuelo del tiburón y se preparara para liberarlo. En un momento inesperado, el animal reaccionó violentamente, provocando una herida considerable en la pierna de Meuse. Sus amigos improvisaron un torniquete mientras solicitaban asistencia médica de emergencia.
El Departamento de Bomberos de Boca Grande informó que el pescador fue trasladado en helicóptero al Gulf Coast Medical Center, en Fort Myers. El meteorólogo Matt Devitt, del canal WINK-TV, difundió el video del ataque en redes sociales, advirtiendo que las imágenes eran fuertes.
Pese a la gravedad de la lesión y la necesidad de una cirugía reconstructiva, Meuse se mantiene optimista y hasta ha hecho bromas desde el hospital. El tiburón limón (Negaprion brevirostris) es una especie protegida en Florida, cuya captura está prohibida por la Comisión de Conservación de Vida Silvestre y Pesca (FWC). Además, para pescar tiburones en aguas del estado es obligatorio contar con un permiso especial y completar una capacitación. Las autoridades confirmaron que Meuse no cumplía con estos requisitos, por lo que se ha iniciado una investigación.
El jefe de bomberos, C.W. Blosser, explicó que la presencia de tiburones se incrementa en la zona durante la temporada de sábalos, pues estos peces atraen a grandes depredadores. Añadió que este ha sido el tercer ataque de tiburón en la región en los últimos 16 años, aunque recordó que, aunque poco frecuentes, estos incidentes siguen siendo un riesgo.
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Hace apenas dos meses, una niña de nueve años también fue atacada por un tiburón en la misma área.
Blosser recomendó a pescadores y bañistas tomar precauciones, y en caso de un ataque, alejarse del animal, aplicar presión en la herida y contactar de inmediato a los servicios de emergencia.
El caso ha generado gran atención en medios nacionales, tanto por la inusual situación como por la actitud positiva del afectado. También ha reavivado el debate sobre la necesidad de reforzar la seguridad y educación para quienes realizan pesca recreativa en zonas con alta presencia de tiburones.
