
Sergio Ángel Soriano relató que al rescatar a las víctimas “la ropa ardía y la piel se desprendía”, mientras vecinos y transeúntes ayudaban en la emergencia.
El policía de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Sergio Ángel Soriano, protagonizó un acto heroico durante la explosión de una pipa en el Puente de la Concordia, en Iztapalapa, Ciudad de México. El elemento de la Policía Bancaria e Industrial logró salvar a una bebé y a su abuela, cuyas imágenes en brazos del policía se volvieron virales.
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En entrevista con Paola Rojas para Imagen Televisión, Soriano relató que, al momento de acercarse a las víctimas, la ropa aún estaba en llamas. “Corrí para auxiliar a la señora Alicia y a la bebé; fue necesario quitarles la ropa para evitar más daños. Contamos con preparación en primeros auxilios y atención a quemaduras, y eso nos permitió actuar rápido”, dijo.
El policía agregó que, pese a quemarse parcialmente el cabello durante la emergencia, continuó apoyando a otros lesionados. “Algunas personas ya no pudimos salvarlas, pero logramos ayudar a la mayoría”, recordó con angustia.
Soriano describió el impacto de la tragedia: “Sujetar a los lesionados fue muy fuerte, la piel se les desprendía. Fue difícil, pero la solidaridad de vecinos, transportistas y comerciantes fue fundamental; algunos incluso echaban tierra sobre vehículos en llamas para contener el fuego”.
La abuela de la bebé, Alicia, se encuentra grave, con quemaduras de tercer grado y en terapia intensiva, mientras que la niña fue trasladada al Hospital Siglo XXI. Sandra, hermana de Alicia, destacó la valentía de su familiar: “Es una guerrera; protegió a su nieta con su propio cuerpo. Era checadora de combis y casi salía de su trabajo cuando ocurrió la tragedia”.
El rescate de la pequeña y su abuela se logró gracias al trabajo conjunto del policía y un motociclista que ayudó a trasladarlas al hospital, convirtiendo el acto heroico en un ejemplo de humanidad frente a la tragedia.
Con información de Excelsior