La promoción de la homosexualidad se considera un delito en Rusia de acuerdo de una ley impulsada por Vladimir Putin en 2013
Vladimir Putin, presidente de Rusia, ha prometido este jueves que en el territorio ruso no se legalizará el matrimonio entre personas del mismo sexo mientras él siga siendo el jefe del Estado, según han informado los medios de comunicación estatales.
“Mientras yo sea presidente, no sucederá”, ha afirmado Putin, en una reunión para discutir posibles cambios a la Constitución de Rusia. La promoción de la homosexualidad se considera un delito en Rusia de acuerdo de una ley impulsada por él en 2013.
“Mientras sea presidente, no tendremos progenitor número uno y número dos, sino papá y mamá”, afirmó Putin, de 67 año, quien apoya abiertamente la idea de insertar una norma en la Constitución rusa que defina el matrimonio “como una unión entre un hombre y una mujer”.
Además, subrayó que la idea de proteger los valores familiares tradicionales es correcta en sí misma, pero es necesario pensar cómo formularla en la legislación de la manera adecuada.
La sustitución de los conceptos ‘padre’ y ‘madre’ por términos neutrales en cuanto a género en los formularios de documentación ya se ha realizado en algunos países, como EEUU en 2011, mientras que en Europa, en febrero de 2018 el Parlamento francés aprobó una ley que ordena sustituir ‘padre’ y ‘madre’ por ‘progenitor 1’ y ‘progenitor 2’ en los formularios escolares para evitar la discriminación contra los padres del mismo sexo.
Asimismo, una medida similar estaba en marcha en Italia, pero en 2018 el entonces ministro del Interior, Matteo Salvini, ordenó restaurar los conceptos tradicionales en los formularios del Gobierno.
“Defenderemos a la familia natural fundada en la unión de un hombre y una mujer”, señaló entonces Salvini, publicó en su momento la agencia ANSA.
Sin embargo, son muchos los analistas que piensan que el verdadero objetivo de Putin es modificar la carta Magna rusa para permanecer en el poder, inclusive después del 2024.
Recordemos que lleva en el poder, ya sea como presidente o como primer ministro, desde hace dos décadas y su mandato actual termina en 2024, lo que le convierte en el mandatario que más tiempo ha permanecido en el poder en la Rusia actual.
Las enmiendas a la Constitución impulsadas por Putin podrían permitirle mantenerse en el poder cuando termine su mandato presidencial, ya sea como primer ministro con más competencias, como senador vitalicio como presidente del Consejo de Estado.
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