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Queremos independencia, ¿pero sin obligaciones o responsabilidades? #ElOpinador

Independencia es esa capacidad para solucionar las cosas por sí sólo. Saber alcanzar por tus medios aspiraciones y objetivos

Hoy celebramos el inicio de nuestra Independencia. Una consecuencia que en 1810 buscaba poner fin al dominio español en los territorios de la entonces conocida como Nueva España.

Un movimiento que después del Grito de Dolores que se conmemoró la noche de ayer, culminó con la entrada del Ejército Trigarante a la Ciudad de México el 27 de septiembre de 1821 que es cuando en estricto sentido tendríamos que estar festejando nuestra Independencia.

Independencia. Una palabra que como la Responsabilidad, todos buscamos queriendo no encontrar. Un sentimiento que emociona y a la vez espanta, pues pocas cosas como la Independencia conllevan tanto compromiso sobre los hombros.

La RAE la define como un sinónimo de libertad, especialmente de un Estado que no es tributario ni depende de otro. También la menciona como entereza y firmeza de carácter. Esa capacidad para solucionar las cosas por sí sólo. Saber alcanzar por tus medios aspiraciones y objetivos. La habilidad para llevar a cabo una tarea solo sin pedir ayuda a los demás.

Y no como aquel escuincle que le pide independencia a sus papás, pero no se sale de la casa, busca un trabajo, paga una renta, lava su ropa, consigue comida y se compra con su esfuerzo un celular, el internet o solventa una colegiatura.

No, independencia es como decía Nietzsche, una cosa de una pequeña minoría, es un privilegio sólo de los fuertes. Ahora les pregunto, ¿qué tan independientes queremos ser?

Porque si bien el Estado debe garantizar oportunidades para todos, eso no significa que pague a fondo perdido por una sociedad que le responda con votos el favor de una caravana con sombrero ajeno.

Y quien recibe debe saber que su independencia estará comprometida a menos que al final del apoyo retribuya a la sociedad con un beneficio para su país y no para una urna.

Es por eso que es tan difícil hablar de Independencia. Pues no es nada fácil, dejar de hacer caso a las recomendaciones de los demás por creer firmemente en tus convicciones. Teniendo claro que el actuar por cuenta propia hace que seamos los únicos responsables de nuestros aciertos y errores.

En fin, mientras reflexionamos sobre la Independencia, disfrutemos del Desfile, y seamos conscientes de los retos y obligaciones que nos dejaron nuestros héroes que nos dieron Patria y Libertad.

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